Bueno, pues finalmente sucedió. Para todas aquellas personas que me han preguntado el porqué no han habido posts nuevos acerca de la Física Cuántica, quiero decirles que el desarrollo del curso de Creación Cuántica de la Realidad me ha mantenido bastante ocupado.
Quiero decirles que este curso se impartirá por vez primera en este mes de Octubre de 2006. Si estás interesado puedes visitar la página del curso aquí. O puedes descargar el tríptico aquí e imprimirlo o verlo en línea (está en formato PDF).
El lugar es limitado. Reserva ya a los teléfonos 484-05-44 y 484-94-87 en Acapulco, Gro.
02 octubre, 2006
15 junio, 2006
Los mensajes del agua (parte 2/2)
A continuación te muestro imágenes de cristales de agua. Los mismos que comenté en la primera parte de este post. Son fantásticas.
Fuente de Lourdes, Francia.
Hielo Antártico
Agua del manantial Sanbu-ichi Yusui, Japón.
Agua de la presa Fujiwara. Antes de ofrecerle una oración.
Agua de la presa Fujiwara. Después de ofrecerle una oración.
Río Yodo, Japan, que fluye en la bahia de Osaka. El río pasa a través de muchas grandes ciudades. Agua extremadamente contaminada.
Gracias
Amor y apreciación
Agua expuesta a frases de "Adolfo Hitler"
Agua expuesta a frases de "Me enfermas. Te mataré"
Agua expuesta a música de Heavy Metal
Agua expuesta a música popular Kawachi
Agua expuesta a música de Beethoven
"Si las emociones, los pensamientos y las oraciones pueden hacerle esto al agua, ¿qué no le estamos haciendo a nuestros cuerpos con nuestros propios pensamientos?" - Recuerda que estamos formados principalmente por agua.
Hasta la próxima.
Fuente de Lourdes, Francia.
Hielo Antártico
Agua del manantial Sanbu-ichi Yusui, Japón.
Agua de la presa Fujiwara. Antes de ofrecerle una oración.
Agua de la presa Fujiwara. Después de ofrecerle una oración.
Río Yodo, Japan, que fluye en la bahia de Osaka. El río pasa a través de muchas grandes ciudades. Agua extremadamente contaminada.
Gracias
Amor y apreciación
Agua expuesta a frases de "Adolfo Hitler"
Agua expuesta a frases de "Me enfermas. Te mataré"
Agua expuesta a música de Heavy Metal
Agua expuesta a música popular Kawachi
Agua expuesta a música de Beethoven
"Si las emociones, los pensamientos y las oraciones pueden hacerle esto al agua, ¿qué no le estamos haciendo a nuestros cuerpos con nuestros propios pensamientos?" - Recuerda que estamos formados principalmente por agua.
Hasta la próxima.
Los mensajes del agua (parte 1/2)
¿Sabes cual es el porcentaje de agua que existe en el planeta? Aproximadamente el 71% de la superficie del planeta está cubierta por agua.
¿Sabes qué porcentaje de agua es del que se compone el cuerpo humano? El agua ocupa aproximadamente el 60% del total de la composición corporal. Además, el 73% de la masa muscular está compuesta por agua. El agua es el nutriente esencial para la supervivencia y es un requisito indispensable para las funciones celulares. Además, debido a que es un componente mayor de la sangre, mantiene la temperatura del cuerpo en niveles normales. El agua corporal se pierde principalmente a través del sudor, respiración y el desperdicio. Entonces, el agua puede llegar a formar más del 80% del total del cuerpo humano.
El agua circunvala la tierra y la alimenta y es la fuente de existencia de todas las formas de vida en este planeta. Es lo que sustenta y hace posible la vida en la forma en que la conocemos.
Pero existe un lado del agua que se encontraba inexplorado hasta hace algunos años.
El Dr. Masaru Emoto de Japón ha estudiado el agua durante mucho tiempo. A través de su investigación ha descubierto muchas propiedades del agua que las que usualmente cualquiera de nosotros pensamos que el agua tiene.
Académicamente hablando, su estudio no está basado en las ciencias naturales, sino en las ciencias culturales.
Te estarás preguntando ¿qué tiene que hacer un científico hablando de una investigación cultural? O mejor aun ¿qué tiene que ver una investigación científica respecto al desarrollo personal de un individuo?
La ciencia tradicional, con su razonamiento convencional no resultó suficiente como para entrar en el mundo de lo que no se puede ver, como el agua.
Lo que hizo el Dr. Emoto es que congeló muestras de agua de distintos lugares y posteriormente utilizando un microscopio muy potente pudo observar que los cristales de esta agua congelada formaban figuras geométricas. Sin embargo notó que las figuras formadas tenían una composición distinta dependiendo del grado de contaminación del agua analizada. Se percató que mientras más pura era el agua, la composición de los cristales resultaba en formas más armónicas y de una belleza increíble.
Imagínate, el agua tiene sus propias formas microscópicas de demostrar sus propios estados anímicos. Ciertamente fue toda una revolución en la forma de concebir el micromundo invisible que nos rodea.
Entonces, el Dr. Emoto trascendió nuevamente su propio pensamiento y descubrió que el agua de no tanta pureza podía llegar a formar cristales de mucha mayor complejidad cuando el agua era expuesta a la música de Mozart.
Más adelante, descubrió que la forma que los cristales tomaban también era influenciada cuando a los recipientes del agua se les pegaban etiquetas que tenían escritas palabras que simbolizaban pensamientos positivos, como amor, perdón, armonía, felicidad, amistad, etc.
Y también descubrió que el agua era sensible a la emoción humana, y demostró a través de un muy estricto protocolo científico, que cuando una persona emitía pensamientos de agradecimiento al agua, ésta reaccionaba formando cristales de compleja belleza y extrema elaboración.
¿Resultado? El agua puede percibir emociones a través de las palabras, de las letras y de los sentimientos. Literalmente hablando, el agua puede escuchar, leer y sentir.
El problema es que el agua es igual de sensible hacia emociones, palabras y sentimientos negativos. Nuestro gran problema, es que esta propiedad del agua también la poseemos nosotros, ya que estamos hechos principalmente de agua. Cada vez que utilizamos pensamientos, palabras o emociones negativas o positivas, estamos influenciando directamente a nuestro cuerpo y a su composición física y química. Somos el resultado directo de nuestros pensamientos, palabras y actos y el agua reacciona de forma instantánea a esto.
Ahora, el agua de nuestro cuerpo se recicla periódicamente, es decir, que mientras ingerimos agua nueva, también hay agua que nos abandona. El problema es que el agua nueva inmediatamente se “contagia” con el agua que ya existe en nuestro cuerpo y que se encuentra resonando a muy bajas frecuencias.
Recordemos lo que nos dice la Física Cuántica respecto a la creación de nuestra realidad al utilizar nuestros pensamientos. Es lo mismo pero a través del agua.
Y citando a la película “What the bleep do you know”: “Si los pensamientos pueden hacer que un cristal de agua cambie su forma, imagínate lo que hacemos a nosotros mismos con nuestros pensamientos”.
Hasta la próxima.
¿Sabes qué porcentaje de agua es del que se compone el cuerpo humano? El agua ocupa aproximadamente el 60% del total de la composición corporal. Además, el 73% de la masa muscular está compuesta por agua. El agua es el nutriente esencial para la supervivencia y es un requisito indispensable para las funciones celulares. Además, debido a que es un componente mayor de la sangre, mantiene la temperatura del cuerpo en niveles normales. El agua corporal se pierde principalmente a través del sudor, respiración y el desperdicio. Entonces, el agua puede llegar a formar más del 80% del total del cuerpo humano.
El agua circunvala la tierra y la alimenta y es la fuente de existencia de todas las formas de vida en este planeta. Es lo que sustenta y hace posible la vida en la forma en que la conocemos.
Pero existe un lado del agua que se encontraba inexplorado hasta hace algunos años.
El Dr. Masaru Emoto de Japón ha estudiado el agua durante mucho tiempo. A través de su investigación ha descubierto muchas propiedades del agua que las que usualmente cualquiera de nosotros pensamos que el agua tiene.
Académicamente hablando, su estudio no está basado en las ciencias naturales, sino en las ciencias culturales.
Te estarás preguntando ¿qué tiene que hacer un científico hablando de una investigación cultural? O mejor aun ¿qué tiene que ver una investigación científica respecto al desarrollo personal de un individuo?
La ciencia tradicional, con su razonamiento convencional no resultó suficiente como para entrar en el mundo de lo que no se puede ver, como el agua.
Lo que hizo el Dr. Emoto es que congeló muestras de agua de distintos lugares y posteriormente utilizando un microscopio muy potente pudo observar que los cristales de esta agua congelada formaban figuras geométricas. Sin embargo notó que las figuras formadas tenían una composición distinta dependiendo del grado de contaminación del agua analizada. Se percató que mientras más pura era el agua, la composición de los cristales resultaba en formas más armónicas y de una belleza increíble.
Imagínate, el agua tiene sus propias formas microscópicas de demostrar sus propios estados anímicos. Ciertamente fue toda una revolución en la forma de concebir el micromundo invisible que nos rodea.
Entonces, el Dr. Emoto trascendió nuevamente su propio pensamiento y descubrió que el agua de no tanta pureza podía llegar a formar cristales de mucha mayor complejidad cuando el agua era expuesta a la música de Mozart.
Más adelante, descubrió que la forma que los cristales tomaban también era influenciada cuando a los recipientes del agua se les pegaban etiquetas que tenían escritas palabras que simbolizaban pensamientos positivos, como amor, perdón, armonía, felicidad, amistad, etc.
Y también descubrió que el agua era sensible a la emoción humana, y demostró a través de un muy estricto protocolo científico, que cuando una persona emitía pensamientos de agradecimiento al agua, ésta reaccionaba formando cristales de compleja belleza y extrema elaboración.
¿Resultado? El agua puede percibir emociones a través de las palabras, de las letras y de los sentimientos. Literalmente hablando, el agua puede escuchar, leer y sentir.
El problema es que el agua es igual de sensible hacia emociones, palabras y sentimientos negativos. Nuestro gran problema, es que esta propiedad del agua también la poseemos nosotros, ya que estamos hechos principalmente de agua. Cada vez que utilizamos pensamientos, palabras o emociones negativas o positivas, estamos influenciando directamente a nuestro cuerpo y a su composición física y química. Somos el resultado directo de nuestros pensamientos, palabras y actos y el agua reacciona de forma instantánea a esto.
Ahora, el agua de nuestro cuerpo se recicla periódicamente, es decir, que mientras ingerimos agua nueva, también hay agua que nos abandona. El problema es que el agua nueva inmediatamente se “contagia” con el agua que ya existe en nuestro cuerpo y que se encuentra resonando a muy bajas frecuencias.
Recordemos lo que nos dice la Física Cuántica respecto a la creación de nuestra realidad al utilizar nuestros pensamientos. Es lo mismo pero a través del agua.
Y citando a la película “What the bleep do you know”: “Si los pensamientos pueden hacer que un cristal de agua cambie su forma, imagínate lo que hacemos a nosotros mismos con nuestros pensamientos”.
Hasta la próxima.
06 junio, 2006
La percepción de las frecuencias
Hoy voy a platicar sobre las frecuencias de vibración de las cosas.
¿Qué es una frecuencia? ¿Cómo describes una frecuencia?
Una frecuencia es un espectro de rangos. Es un rango de valores sobre los cuales podemos medir o cuantificar distintas cosas. Por ejemplo, el agua para poder decir que es agua tiene cierto rango de frecuencia. El aire tiene la suya. La piedras, los autos, etc.
En el caso de una persona, parece ser que las frecuencias son una cosa mucho más complicada, ya que el cuerpo de una persona es realmente una colección de frecuencias. Tenemos por ejemplo, la frecuencia respiratoria, la frecuencia cardiaca, nuestros oidos perciben solo cierto tipo de frecuencias auditivas, e incluso nuestros ojos pueden ver solo cierto tipo de frecuencias luminosas.
Aquí es donde quiero llegar.
Nuestros oídos tienen un potencial de escucha que varía desde los 20 hertz hasta los 20,000 hertz aproximadamente. Se supone que la audición no se percibe fuera de estos rangos, aunque hay excepciones para esta regla, por supuesto. Sin embargo, existen sonidos que caen dentro de nuestro espectro auditivo que no somos capaces de escuchar. Los oímos pero no los escuchamos. Hay que recordar que oír es algo pasivo e inconsciente mientras que escuchar es algo activo y 100% consciente.
El hecho de que no seamos capaces de escuchar un sonido que llegue a nosotros en este espectro auditivo no significa que el sonido no existe, ya que hay animales que pueden escuchar sonidos que nosotros no somos capaces de escuchar.
Por otro lado, tenemos también la frecuencia de la luz, que permite a nuestros ojos ver nuestra realidad. Nuestros ojos perciben una frecuencia vibracional de la luz. Nuevamente, si existe algo que tiene una frecuencia de vibración distinta a lo que percibimos, nuestro cerebro no será capaz de reconocerlo, y eso no implica que no esté ahí.
De hecho, podría ser la explicación de muchos de los llamados fenómenos paranormales que se escuchan por cualquier lado. A lo mejor son ciertos, y solo se trataría de entidades que tienen un nivel de vibración distinto al que los demás tenemos.
Si alguien fuera capaz de manipular la frecuencia de vibración de la luz, sería posible hacer un objeto físico completamente invisible a la luz. Por cierto, déjame contarte algo muy interesante:
En 1943, la marina de los EEUU realizó experimentos en el destructor Eldridge para crear invisibilidad al radar (algo así como los famosos aviones stealth o furtivos). Esto se realizó a través de formar un poderosísimo campo magnético alrededor y a través del barco. Basado en la teoría de campo unificado de Einstein, se sabe que el experimento de hecho hizo invisible al barco y a todos sus tripulantes no solo al radar, sino también al ojo. Es decir que obtuvieron una invisibilidad óptica por completo. Cuando el barco regresó, toda la tripulación adquirió comportamientos completamente violentos (como si estuvieran enfermos de ira), o se perdieron en el barco o se fusionaron con el barco. Los que sobrevivieron murieron durante los siguientes meses. Actualmente a los experimentos que continúan hoy en día se les conoce con el nombre del proyecto Montauk.
Otro caso de las frecuencias es cuando alguna persona no nos cae bien. ¿Nunca te ha pasado? Cuando de repente conoces a alguien que simplemente no te late. Y hasta dices “esa persona me cae mal” ¿Porqué? Si no te ha hceho nada. Y dices “no se, solamente me cae mal”.
Esto es lo que se le conoce como la “vibra” o la “química”. Es cuando una persona te late.
¿Así que como ves? Ahora resulta que una persona nos late solo porque la frecuencia de vibración de esa persona es similar a la nuestra o la percepción que tenemos de esa frecuencia es agradable a la nuestra. Mira nada más donde nos encontramos a la física.
¿Has puesto tu atención en el tipo de personas o situaciones que te rodean? Estas personas tienen un rango de frecuencias muy similar al tuyo, por eso están muy cerca de tí. ¿No te gusta lo que tienes cerca o a quien tienes cerca? Entonces necesitas aprender a vibrar a una frecuencia distinta.
Requieres cambiar tu frecuencia de vibración para poder cambiar tu relidad.
Hasta la próxima.
¿Qué es una frecuencia? ¿Cómo describes una frecuencia?
Una frecuencia es un espectro de rangos. Es un rango de valores sobre los cuales podemos medir o cuantificar distintas cosas. Por ejemplo, el agua para poder decir que es agua tiene cierto rango de frecuencia. El aire tiene la suya. La piedras, los autos, etc.
En el caso de una persona, parece ser que las frecuencias son una cosa mucho más complicada, ya que el cuerpo de una persona es realmente una colección de frecuencias. Tenemos por ejemplo, la frecuencia respiratoria, la frecuencia cardiaca, nuestros oidos perciben solo cierto tipo de frecuencias auditivas, e incluso nuestros ojos pueden ver solo cierto tipo de frecuencias luminosas.
Aquí es donde quiero llegar.
Nuestros oídos tienen un potencial de escucha que varía desde los 20 hertz hasta los 20,000 hertz aproximadamente. Se supone que la audición no se percibe fuera de estos rangos, aunque hay excepciones para esta regla, por supuesto. Sin embargo, existen sonidos que caen dentro de nuestro espectro auditivo que no somos capaces de escuchar. Los oímos pero no los escuchamos. Hay que recordar que oír es algo pasivo e inconsciente mientras que escuchar es algo activo y 100% consciente.
El hecho de que no seamos capaces de escuchar un sonido que llegue a nosotros en este espectro auditivo no significa que el sonido no existe, ya que hay animales que pueden escuchar sonidos que nosotros no somos capaces de escuchar.
Por otro lado, tenemos también la frecuencia de la luz, que permite a nuestros ojos ver nuestra realidad. Nuestros ojos perciben una frecuencia vibracional de la luz. Nuevamente, si existe algo que tiene una frecuencia de vibración distinta a lo que percibimos, nuestro cerebro no será capaz de reconocerlo, y eso no implica que no esté ahí.
De hecho, podría ser la explicación de muchos de los llamados fenómenos paranormales que se escuchan por cualquier lado. A lo mejor son ciertos, y solo se trataría de entidades que tienen un nivel de vibración distinto al que los demás tenemos.
Si alguien fuera capaz de manipular la frecuencia de vibración de la luz, sería posible hacer un objeto físico completamente invisible a la luz. Por cierto, déjame contarte algo muy interesante:
En 1943, la marina de los EEUU realizó experimentos en el destructor Eldridge para crear invisibilidad al radar (algo así como los famosos aviones stealth o furtivos). Esto se realizó a través de formar un poderosísimo campo magnético alrededor y a través del barco. Basado en la teoría de campo unificado de Einstein, se sabe que el experimento de hecho hizo invisible al barco y a todos sus tripulantes no solo al radar, sino también al ojo. Es decir que obtuvieron una invisibilidad óptica por completo. Cuando el barco regresó, toda la tripulación adquirió comportamientos completamente violentos (como si estuvieran enfermos de ira), o se perdieron en el barco o se fusionaron con el barco. Los que sobrevivieron murieron durante los siguientes meses. Actualmente a los experimentos que continúan hoy en día se les conoce con el nombre del proyecto Montauk.
Otro caso de las frecuencias es cuando alguna persona no nos cae bien. ¿Nunca te ha pasado? Cuando de repente conoces a alguien que simplemente no te late. Y hasta dices “esa persona me cae mal” ¿Porqué? Si no te ha hceho nada. Y dices “no se, solamente me cae mal”.
Esto es lo que se le conoce como la “vibra” o la “química”. Es cuando una persona te late.
¿Así que como ves? Ahora resulta que una persona nos late solo porque la frecuencia de vibración de esa persona es similar a la nuestra o la percepción que tenemos de esa frecuencia es agradable a la nuestra. Mira nada más donde nos encontramos a la física.
¿Has puesto tu atención en el tipo de personas o situaciones que te rodean? Estas personas tienen un rango de frecuencias muy similar al tuyo, por eso están muy cerca de tí. ¿No te gusta lo que tienes cerca o a quien tienes cerca? Entonces necesitas aprender a vibrar a una frecuencia distinta.
Requieres cambiar tu frecuencia de vibración para poder cambiar tu relidad.
Hasta la próxima.
El "milagro" de la sanación
Hoy voy a platicar sobre casos de sanación de enfermedades inducidos por la mente.
Antes hay que recordar que nuestro cuerpo es el resultado de nuestros pensamientos. Apenas se comienza a entender en la ciencia el grado con el cual la naturaleza de nuestros pensamientos y emociones determinan la sustancia y la estructura físicas así como las sustancias de nuestros cuerpos.
CASO 1. En marzo 10 de 1981, el estadounidense Morris Goodman tuvo un accidente en su avioneta. Este accidente lo paralizó totalmente. Su espina dorsal se aplastó por completo. Se rompió la primera y segunda vértebra cervical. Su reflejo para tragar fue destruido por completo, es decir, no podía comer o beber. Su diafragma se destruyó, no podía respirar. Solo podía parpadear sus ojos. Los doctores, por supuesto le diagnosticaron que pasaría el resto de su vida como un vegetal.
En este momento algo pasó por su mente. Fue una idea. La idea de que solo tenía su mente y su deseo de regresar a su vida normal. Esta idea que implantó en su mente era muy simple: volver a caminar.
Este fue su pensamiento. Solo ese. Todo el día. Día tras día. Minuto tras minuto. El juró a todos en el hospital que estaría caminando para la navidad de ese año.
Bueno, para acortar una historia larga, en la navidad de ese mismo año, 1981, Morris Goodman abandonó finalmente el hospital... caminando por su pie propio, sin aparatos ni equipamientos. Con una tremenda certeza, Morris sanó su cuerpo desde el interior, negándose a entender la información médica de que jamás volvería a caminar. Ignoró por completo el hecho de que la columna vertebral no se regenera. Actualmente se le conoce como “El Hombre Milagro”. Puedes visitar su website en www.themiracleman.org
CASO 2. El 23 de Noviembre de 2005, Kathy Goodman fue diagnosticada con cáncer de mama. En ese momento ella comenzó a creer con todo su corazón, con su completa fuerza interior personal... que ya estaba curada.
Durante el día... todo el día... en cada momento... ella solo se repetía “Gracias por mi sanación”... continuamente y en cada momento del día se repetía esto: “gracias por mi sanación”. Ella creyó desde su corazón que ya estaba curada. Simplemente cualquier pequeño pensamiento de enfermedad desapareció de su mente. Nunca habló de su enfermedad con nadie. Nadie le recordó que estaba enferma. Erradicó completamente este pensamiento de su mente. Se veía a sí misma como si el cáncer nunca hubiera estado en su cuerpo. Una de las cosas que hizo fue apartar cualquier tipo de stress de su vida. Evitó pensar en problemas, porque ella sabía que el stress es una de las peores cosas que puedes hacer mientras estás tratando de sanarte a ti mismo.
Desde el momento en que fue diagnosticada con cáncer en Noviembre de 2005, al momento en que se curó completamente transcurrieron aproximadamente 3 meses, y eso ocurrió sin radiación o quimioterapia.
Nuestra fisiología crea la enfermedad para darnos retroalimentación, para dejarnos saber que tenemos una perspectiva inbalanceada en nuestro comportamiento o actitud. Así que los síntomas del cuerpo no son realmente algo terrible, ya que nos están dando información. El problema es que nuestra cultura de la enfermedad nos hace afrontar este hecho como algo malo. La enfermedad no es realmente mala, siempre y cuando sepamos entenderla. Si fuéramos capaces de saber qué es lo que nuestra mente nos quiere decir a través de la enfermedad, la cura sería automática o espontánea.
La enfermedad no puede vivir en un cuerpo que se encuentra en un estado emocional saludable. Nuestro cuerpo crea constantemente miles de células nuevas. Literalmente hablando, tenemos partes del cuerpo que son reemplazadas cada determinado tiempo, por lo que podemos decir que cada cierta cantidad de tiempo tenemos un cuerpo físico nuevo.
El detalle a todo esto es: ¿Qué pensamientos les estás entregando a esas células nuevas que se están creando? Recordarás que en posts anteriores hablé sobre que las emociones alimentan a las células. Si tus emociones giran respecto a una enfermedad, adivina qué es lo que les estás dando a las células nuevas que son creadas en tu organismo.
Imagina cual es la orden que tus células reciben: Enfermedad
Hasta la próxima.
Antes hay que recordar que nuestro cuerpo es el resultado de nuestros pensamientos. Apenas se comienza a entender en la ciencia el grado con el cual la naturaleza de nuestros pensamientos y emociones determinan la sustancia y la estructura físicas así como las sustancias de nuestros cuerpos.
CASO 1. En marzo 10 de 1981, el estadounidense Morris Goodman tuvo un accidente en su avioneta. Este accidente lo paralizó totalmente. Su espina dorsal se aplastó por completo. Se rompió la primera y segunda vértebra cervical. Su reflejo para tragar fue destruido por completo, es decir, no podía comer o beber. Su diafragma se destruyó, no podía respirar. Solo podía parpadear sus ojos. Los doctores, por supuesto le diagnosticaron que pasaría el resto de su vida como un vegetal.
En este momento algo pasó por su mente. Fue una idea. La idea de que solo tenía su mente y su deseo de regresar a su vida normal. Esta idea que implantó en su mente era muy simple: volver a caminar.
Este fue su pensamiento. Solo ese. Todo el día. Día tras día. Minuto tras minuto. El juró a todos en el hospital que estaría caminando para la navidad de ese año.
Bueno, para acortar una historia larga, en la navidad de ese mismo año, 1981, Morris Goodman abandonó finalmente el hospital... caminando por su pie propio, sin aparatos ni equipamientos. Con una tremenda certeza, Morris sanó su cuerpo desde el interior, negándose a entender la información médica de que jamás volvería a caminar. Ignoró por completo el hecho de que la columna vertebral no se regenera. Actualmente se le conoce como “El Hombre Milagro”. Puedes visitar su website en www.themiracleman.org
CASO 2. El 23 de Noviembre de 2005, Kathy Goodman fue diagnosticada con cáncer de mama. En ese momento ella comenzó a creer con todo su corazón, con su completa fuerza interior personal... que ya estaba curada.
Durante el día... todo el día... en cada momento... ella solo se repetía “Gracias por mi sanación”... continuamente y en cada momento del día se repetía esto: “gracias por mi sanación”. Ella creyó desde su corazón que ya estaba curada. Simplemente cualquier pequeño pensamiento de enfermedad desapareció de su mente. Nunca habló de su enfermedad con nadie. Nadie le recordó que estaba enferma. Erradicó completamente este pensamiento de su mente. Se veía a sí misma como si el cáncer nunca hubiera estado en su cuerpo. Una de las cosas que hizo fue apartar cualquier tipo de stress de su vida. Evitó pensar en problemas, porque ella sabía que el stress es una de las peores cosas que puedes hacer mientras estás tratando de sanarte a ti mismo.
Desde el momento en que fue diagnosticada con cáncer en Noviembre de 2005, al momento en que se curó completamente transcurrieron aproximadamente 3 meses, y eso ocurrió sin radiación o quimioterapia.
Nuestra fisiología crea la enfermedad para darnos retroalimentación, para dejarnos saber que tenemos una perspectiva inbalanceada en nuestro comportamiento o actitud. Así que los síntomas del cuerpo no son realmente algo terrible, ya que nos están dando información. El problema es que nuestra cultura de la enfermedad nos hace afrontar este hecho como algo malo. La enfermedad no es realmente mala, siempre y cuando sepamos entenderla. Si fuéramos capaces de saber qué es lo que nuestra mente nos quiere decir a través de la enfermedad, la cura sería automática o espontánea.
La enfermedad no puede vivir en un cuerpo que se encuentra en un estado emocional saludable. Nuestro cuerpo crea constantemente miles de células nuevas. Literalmente hablando, tenemos partes del cuerpo que son reemplazadas cada determinado tiempo, por lo que podemos decir que cada cierta cantidad de tiempo tenemos un cuerpo físico nuevo.
El detalle a todo esto es: ¿Qué pensamientos les estás entregando a esas células nuevas que se están creando? Recordarás que en posts anteriores hablé sobre que las emociones alimentan a las células. Si tus emociones giran respecto a una enfermedad, adivina qué es lo que les estás dando a las células nuevas que son creadas en tu organismo.
Imagina cual es la orden que tus células reciben: Enfermedad
Hasta la próxima.
30 mayo, 2006
El consciente e inconsciente y las enfermedades
En este post voy a comentar más sobre las mentes consciente e inconsciente, pero voy a combinar esta información con la de las enfermedades creadas de forma inconsciente.
Como ya lo mencioné con anterioridad, la mente tiene todos los elementos para crear nuestra realidad exterior. Esta realidad exterior incluye también las enfermedades que nuestro cuerpo adquiere.
¿Porqué nos enfermamos? Primero hay que recordar que vivimos en un universo de energía y de frecuencias. Cualquier situación que vivimos y experimentamos por el simple hecho de hacerlo, genera cierto tipo de frecuencia. Nuestro cerebro está preparado para lidiar y entender estas frecuencias. Desgraciadamente, la mayoría de estas frecuencias no son percibidas de forma consciente.
¿Sabes? La mente consciente tiene una capacidad muy limitada para manejar información. La capacidad de la mente consciente es de 5 +- 2 unidades de información. Es decir que podemos manejar en promedio, desde 3 hasta 7 piezas de información simultáneamente. En mi empresa he tenido adultos que incluso tienen problemas para poder manejar 2 piezas de información de forma simultánea. Aproximadamente el 80% de la población en México maneja un promedio de 3 piezas simultáneas de información. ¡Esto es terrible!. ¿Sabes lo que esto significa? Que si teclean un número telefónico desde la agenda al teléfono tendrían que voltear a ver su agenda en 3 ocasiones en lugar de solo una vez. ¿Es esto difícil de creer? Si. ¿Es esto cierto? Si.
Por otro lado, la mente subconsciente puede trabajar con más de 20,000 piezas de información simultáneamente y procesarlas con éxito. Pero como ya decía en posts anteriores, el problema es que no puede integrar toda esta información con la mente consciente, por ende nunca nos damos cuenta de que recibimos o absorbimos esta información. Es decir, no tenemos un mecanismo claro para establecer comunicación entre el consciente e inconsciente.
Volviendo al tema de las enfermedades. ¿Sabías que la mente tiene el poder suficiente para producir cualquier tipo de enfermedad en el cuerpo?. Nueno, si no lo sabías, así es.
Pero lo que pocos saben es que también tenemos una increíble capacidad para sanar. ¿Porqué no hay tanta información al respecto? Por que desde que somos niños, nos son implantados miles de pequeños “programas” (también llamados creencias) respecto a las enfermedades, pero nunca nos hablan sobre la salud. ¿Qué te parece esto? Hemos estudiado tanto la enfermedad, que existen cientos de miles de libros, diccionarios y estudios científicos realizados respecto a la enfermedad. Hay docenas de especialidades médicas. Un médico tiene que pasar por cientos de horas de estudio y de práctica antes de terminar su carrera de medicina. Se les enseña todo lo que hay que saber respecto a la enfermedad.
¿Sabes tu cuantos libros, diccionarios y estudios científicos hay respecto a la salud?
Tenemos una cultura tremendamente alta respecto a la enfermedad, pero escandalosamente baja respecto a la salud. Estamos mentalmente programados para sucumbir a la enfermedad.
Por eso es que las personas enfermas en fases terminales que súbitamente se curan, se les da la categoría de “milagros”. Los médicos no saben qué es, simplemente atinan a decir que los medicamentos y el tratamiento finalmente surtieron resultados. ¿Pero qué es lo que hay atrás? Un profundo y sólido pensamiento de querer vivir de esa persona. Un pensamiento de creación de realidad lo suficientemente fuerte como para derribar todas las creencias respecto a su enfermedad y formular una realidad mucho más armoniosa y funcional.
Existen miles de casos así, donde la última herramienta de supervivencia de una persona (la mente) es puesta a prueba y resultan ganadores. Así es como se vence una enfermedad, a través de una convicción ciega en que el cuerpo recupera la salud.
Cada enfermedad es un reflejo de nuestro estado mental.
¿Y tu? ¿Estás enfermo hoy? ¿Qué te está diciendo tu mente a través del cuerpo?
Hasta la próxima.
Como ya lo mencioné con anterioridad, la mente tiene todos los elementos para crear nuestra realidad exterior. Esta realidad exterior incluye también las enfermedades que nuestro cuerpo adquiere.
¿Porqué nos enfermamos? Primero hay que recordar que vivimos en un universo de energía y de frecuencias. Cualquier situación que vivimos y experimentamos por el simple hecho de hacerlo, genera cierto tipo de frecuencia. Nuestro cerebro está preparado para lidiar y entender estas frecuencias. Desgraciadamente, la mayoría de estas frecuencias no son percibidas de forma consciente.
¿Sabes? La mente consciente tiene una capacidad muy limitada para manejar información. La capacidad de la mente consciente es de 5 +- 2 unidades de información. Es decir que podemos manejar en promedio, desde 3 hasta 7 piezas de información simultáneamente. En mi empresa he tenido adultos que incluso tienen problemas para poder manejar 2 piezas de información de forma simultánea. Aproximadamente el 80% de la población en México maneja un promedio de 3 piezas simultáneas de información. ¡Esto es terrible!. ¿Sabes lo que esto significa? Que si teclean un número telefónico desde la agenda al teléfono tendrían que voltear a ver su agenda en 3 ocasiones en lugar de solo una vez. ¿Es esto difícil de creer? Si. ¿Es esto cierto? Si.
Por otro lado, la mente subconsciente puede trabajar con más de 20,000 piezas de información simultáneamente y procesarlas con éxito. Pero como ya decía en posts anteriores, el problema es que no puede integrar toda esta información con la mente consciente, por ende nunca nos damos cuenta de que recibimos o absorbimos esta información. Es decir, no tenemos un mecanismo claro para establecer comunicación entre el consciente e inconsciente.
Volviendo al tema de las enfermedades. ¿Sabías que la mente tiene el poder suficiente para producir cualquier tipo de enfermedad en el cuerpo?. Nueno, si no lo sabías, así es.
Pero lo que pocos saben es que también tenemos una increíble capacidad para sanar. ¿Porqué no hay tanta información al respecto? Por que desde que somos niños, nos son implantados miles de pequeños “programas” (también llamados creencias) respecto a las enfermedades, pero nunca nos hablan sobre la salud. ¿Qué te parece esto? Hemos estudiado tanto la enfermedad, que existen cientos de miles de libros, diccionarios y estudios científicos realizados respecto a la enfermedad. Hay docenas de especialidades médicas. Un médico tiene que pasar por cientos de horas de estudio y de práctica antes de terminar su carrera de medicina. Se les enseña todo lo que hay que saber respecto a la enfermedad.
¿Sabes tu cuantos libros, diccionarios y estudios científicos hay respecto a la salud?
Tenemos una cultura tremendamente alta respecto a la enfermedad, pero escandalosamente baja respecto a la salud. Estamos mentalmente programados para sucumbir a la enfermedad.
Por eso es que las personas enfermas en fases terminales que súbitamente se curan, se les da la categoría de “milagros”. Los médicos no saben qué es, simplemente atinan a decir que los medicamentos y el tratamiento finalmente surtieron resultados. ¿Pero qué es lo que hay atrás? Un profundo y sólido pensamiento de querer vivir de esa persona. Un pensamiento de creación de realidad lo suficientemente fuerte como para derribar todas las creencias respecto a su enfermedad y formular una realidad mucho más armoniosa y funcional.
Existen miles de casos así, donde la última herramienta de supervivencia de una persona (la mente) es puesta a prueba y resultan ganadores. Así es como se vence una enfermedad, a través de una convicción ciega en que el cuerpo recupera la salud.
Cada enfermedad es un reflejo de nuestro estado mental.
¿Y tu? ¿Estás enfermo hoy? ¿Qué te está diciendo tu mente a través del cuerpo?
Hasta la próxima.
29 mayo, 2006
Las mentes consciente e inconsciente
Hola de nuevo. ¿Cómo te trata la realidad?.
Hoy voy a platicar sobre las mentes consciente e inconsciente y la forma en que participan en el proceso de creación cuántica de la realidad.
Todos tenemos 2 mentes: una llamada consciente y una conocida como no consciente, también llamada subconsciente o inconsciente. Los términos son intercambiables.
La mente consciente es aquella que nos permite actuar cada día y en cada momento. Es la que se encarga de percibir nuestro mundo “real”. La mente consciente tiene una capacidad tan limitada que responde prácticamente de forma automática al entorno que nos rodea.
Estas respuestas automáticas tienen su fundamento en los programas profundos que se encuentran grabados en la poderosísima mente subconsciente. Esta mente es una mente que absorbe todo, que escucha todo, que aprende todo y que recuerda todo. Su capacidad de procesamiento es infinitamente superior al de la mente consciente. Esta mente nunca duerme. Su capacidad es tan poderosa, que al momento en que surge un problema en nuestra vida, la mente subconsciente ya tiene una solución. El problema es que al tratarse de una entidad fuera de nuestra consciencia carece de una voz que podamos escuchar.
Entonces, no nos es posible escuchar a nuestra mente subconsciente de la misma forma en que escuchamos a nuestro consciente, pero ciertamente todos hemos escuchado en alguna ocasión a nuestra mente subconsciente, tal vez en forma de alguna sensación de que algo bueno o malo iba a pasar, tal vez en forma de nerviosismo sin razón aparente, tal vez en forma de sueño, a veces las cosas “nos laten”, etc. Esta es la forma en que escuchamos a nuestro subconsciente. Mientras más tranquila y callada se encuentra nuestra voz consciente interior es cuando más escuchamos a nuestro subconsciente. Es por esto que la meditación es una práctica muy recomendada en muchas culturas para encontrar un equilibrio interno, ya que nos pone en contacto con nuestro yo interior.
Imagínate, el cerebro procesa el equivalente a 46 gigabytes de información cada día y percibimos menos de 1 gygabyte, significa que la realidad ocurre todo el tiempo en el cerebro, mismo que es capaz de recibir toda esa información pero que no puede integrar.
Platiquemos ahora de la mente subconsciente. En el subconsciente se encuentran alojadas todas las raíces de nuestros comportamientos, todas. Estos son lo que yo llamo "pensamientos patrocinadores", ya que “patrocinan” al resto de los pensamientos que de ellos emanan; es decir, todas nuestras conductas y todas nuestras respuestas automáticas a los estímulos del exterior tienen su origen de existir en estos pensamientos patrocinadores.
Aquí es donde se encuentran fijas y enraizadas todas nuestras creencias. Creencias religiosas, familiares, sociales, culturales, etc. Muchas de ellas no son nuestras, sino que fueron impuestas por nuestros padres, familiares, maestros, amigos, etc. en algún momento o etapa de nuestras vidas, pero lo más triste es que nunca nos cuestionamos porqué tenemos esas creencias, simplemente actuamos ante ellas.
Me gustaría hacer una analogía con esto. Imagínate que somos una computadora. La llamada memoria RAM es el equivalente a la mente consciente y el disco duro es la mente subconsciente, pero además imagina que tienes instalado cientos de discos duros internos y cientos de discos duros externos.
¿De donde sale la información que se instala en la memoria RAM de una computadora? De los discos duros. En algún momento de nuestras vidas alguien grabó un programa (de hecho son miles de ellos) en el disco duro, por eso cada día que pasa lo primero que hacemos cada mañana es cargar nuestros programas en la memoria RAM y comenzar a hacer nuestras labores.
Ahora sí, ya estamos listos para lidiar con el mundo con toda nuestra carga de ideas, de creencias, de pensamientos y de basura emocional. ¿Y sabes qué? Que hacemos este proceso todos los días a cada momento y en cada segundo. Y en el momento en que alguien trata de quitarnos uno de nuestros programas, actuamos como adictos y evitamos a toda costa que nos quiten algo con lo que nos sentimos muy cómodos. Aunque se traten de programas que nos perjudican, no queremos que nadie nos los quite.
¿Qué podemos hacer para cambiar uno de estos programas en un programa que nos ayude? Voy de vuelta al ejemplo de la computadora. He aquí una serie de pasos que yo te propongo:
Paso 1: Querer. Si no quieres desinstalar un programa, nunca va a pasar.
Paso 2: Darte cuenta. Darte cuenta de lo que quieres desinstalar de tu sistema.
Paso 3: Desinstalarlo. Esto es, descubrir una actitud que te sea de mayor utilidad que la que te está lastimando. Cuando descubres esta nueva actitud, te haces más consciente y puedes comparar una actitud con la otra. Es decir, ¿cómo puedes saber que algo es dulce si no has probado lo salado? ¿Cómo sabes que algo es bueno si no sabes lo que es malo? Al encontrar un comportamiento o creencia distinto, entonces ya sabes perfectamente qué es lo que no quieres.
Paso 4: Resetear la computadora. Y tal vez el más difícil. Muchas veces tienes que reiniciar la computadora para que los últimos archivos se desinstalen del equipo. Esto implica utilizar la nueva actitud o el nuevo programa hasta que el comportamiento adquirido se lleve a cabo de forma completamente inconsciente. En ese entonces la actitud ya es tuya. Ya tienes un comportamiento nuevo y mucho más funcional que el anterior.
Te invito (¿o debo decir "Te reto"?) a que le des una prueba a estos pasos y que te ayudes a tí mismo a construir una mente con menos ataduras y creencias limitantes.
Como siempre, es tu vida. Es tu decisión.
Hasta la siguiente.
Hoy voy a platicar sobre las mentes consciente e inconsciente y la forma en que participan en el proceso de creación cuántica de la realidad.
Todos tenemos 2 mentes: una llamada consciente y una conocida como no consciente, también llamada subconsciente o inconsciente. Los términos son intercambiables.
La mente consciente es aquella que nos permite actuar cada día y en cada momento. Es la que se encarga de percibir nuestro mundo “real”. La mente consciente tiene una capacidad tan limitada que responde prácticamente de forma automática al entorno que nos rodea.
Estas respuestas automáticas tienen su fundamento en los programas profundos que se encuentran grabados en la poderosísima mente subconsciente. Esta mente es una mente que absorbe todo, que escucha todo, que aprende todo y que recuerda todo. Su capacidad de procesamiento es infinitamente superior al de la mente consciente. Esta mente nunca duerme. Su capacidad es tan poderosa, que al momento en que surge un problema en nuestra vida, la mente subconsciente ya tiene una solución. El problema es que al tratarse de una entidad fuera de nuestra consciencia carece de una voz que podamos escuchar.
Entonces, no nos es posible escuchar a nuestra mente subconsciente de la misma forma en que escuchamos a nuestro consciente, pero ciertamente todos hemos escuchado en alguna ocasión a nuestra mente subconsciente, tal vez en forma de alguna sensación de que algo bueno o malo iba a pasar, tal vez en forma de nerviosismo sin razón aparente, tal vez en forma de sueño, a veces las cosas “nos laten”, etc. Esta es la forma en que escuchamos a nuestro subconsciente. Mientras más tranquila y callada se encuentra nuestra voz consciente interior es cuando más escuchamos a nuestro subconsciente. Es por esto que la meditación es una práctica muy recomendada en muchas culturas para encontrar un equilibrio interno, ya que nos pone en contacto con nuestro yo interior.
Imagínate, el cerebro procesa el equivalente a 46 gigabytes de información cada día y percibimos menos de 1 gygabyte, significa que la realidad ocurre todo el tiempo en el cerebro, mismo que es capaz de recibir toda esa información pero que no puede integrar.
Platiquemos ahora de la mente subconsciente. En el subconsciente se encuentran alojadas todas las raíces de nuestros comportamientos, todas. Estos son lo que yo llamo "pensamientos patrocinadores", ya que “patrocinan” al resto de los pensamientos que de ellos emanan; es decir, todas nuestras conductas y todas nuestras respuestas automáticas a los estímulos del exterior tienen su origen de existir en estos pensamientos patrocinadores.
Aquí es donde se encuentran fijas y enraizadas todas nuestras creencias. Creencias religiosas, familiares, sociales, culturales, etc. Muchas de ellas no son nuestras, sino que fueron impuestas por nuestros padres, familiares, maestros, amigos, etc. en algún momento o etapa de nuestras vidas, pero lo más triste es que nunca nos cuestionamos porqué tenemos esas creencias, simplemente actuamos ante ellas.
Me gustaría hacer una analogía con esto. Imagínate que somos una computadora. La llamada memoria RAM es el equivalente a la mente consciente y el disco duro es la mente subconsciente, pero además imagina que tienes instalado cientos de discos duros internos y cientos de discos duros externos.
¿De donde sale la información que se instala en la memoria RAM de una computadora? De los discos duros. En algún momento de nuestras vidas alguien grabó un programa (de hecho son miles de ellos) en el disco duro, por eso cada día que pasa lo primero que hacemos cada mañana es cargar nuestros programas en la memoria RAM y comenzar a hacer nuestras labores.
Ahora sí, ya estamos listos para lidiar con el mundo con toda nuestra carga de ideas, de creencias, de pensamientos y de basura emocional. ¿Y sabes qué? Que hacemos este proceso todos los días a cada momento y en cada segundo. Y en el momento en que alguien trata de quitarnos uno de nuestros programas, actuamos como adictos y evitamos a toda costa que nos quiten algo con lo que nos sentimos muy cómodos. Aunque se traten de programas que nos perjudican, no queremos que nadie nos los quite.
¿Qué podemos hacer para cambiar uno de estos programas en un programa que nos ayude? Voy de vuelta al ejemplo de la computadora. He aquí una serie de pasos que yo te propongo:
Paso 1: Querer. Si no quieres desinstalar un programa, nunca va a pasar.
Paso 2: Darte cuenta. Darte cuenta de lo que quieres desinstalar de tu sistema.
Paso 3: Desinstalarlo. Esto es, descubrir una actitud que te sea de mayor utilidad que la que te está lastimando. Cuando descubres esta nueva actitud, te haces más consciente y puedes comparar una actitud con la otra. Es decir, ¿cómo puedes saber que algo es dulce si no has probado lo salado? ¿Cómo sabes que algo es bueno si no sabes lo que es malo? Al encontrar un comportamiento o creencia distinto, entonces ya sabes perfectamente qué es lo que no quieres.
Paso 4: Resetear la computadora. Y tal vez el más difícil. Muchas veces tienes que reiniciar la computadora para que los últimos archivos se desinstalen del equipo. Esto implica utilizar la nueva actitud o el nuevo programa hasta que el comportamiento adquirido se lleve a cabo de forma completamente inconsciente. En ese entonces la actitud ya es tuya. Ya tienes un comportamiento nuevo y mucho más funcional que el anterior.
Te invito (¿o debo decir "Te reto"?) a que le des una prueba a estos pasos y que te ayudes a tí mismo a construir una mente con menos ataduras y creencias limitantes.
Como siempre, es tu vida. Es tu decisión.
Hasta la siguiente.
25 mayo, 2006
La Física Cuántica y el Amor
En este post voy a comentar sobre la Física Cuántica y cómo se relaciona con el amor.
Desde el punto de vista biológico, ¿cómo describimos el amor?
Químicamente hablando, es un estado muy similar al que tenemos cuando comemos chocolate. El chocolate ha sido incluso llamado “La comida del amor”, ya que el chocolate estimula la producción de un neurotransmisor llamado “dopamina”, mismo que se encarga de activar la proteína que inicia la segregación de hormonas que supuestamente hace que una persona se sienta atraída hacia el sexo. Obviamente, todos sabemos que hay muchos hombres y mujeres que parece que nacieron con una barra de chocolate en el cerebro y que parece que piensan con otras partes del cuerpo que no son necesariamente el cerebro ;-)
Desde el punto de vista emocional, y como ya lo comentaba yo en posts anteriores, el amor es una emoción que se encuentra grabada holográficamente en el cerebro y el cerebro tiene un químico asociado directamente con esta emoción. Así que técnicamente y desde el punto de vista químico, el amor es un péptido emitido por el hipotálamo que se encarga de alimentar a las células de todo el cuerpo.
Como ya lo comentaba, tendemos a hacernos adictos a nuestras emociones, y el amor, al ser una emoción, no es una excepción. Es más fácil que difícil que una persona se haga adicta a esta emoción.
De aquí es de donde sale el famoso amor platónico, donde por ejemplo, una persona tiene una sensación de “amor” hacia otra persona que por lo regular no lo pela. Sin embargo, esto es otra ilusión que nos da el cerebro, ya que hay que recordar que la verdadera experiencia de vida no ocurre con los hechos que nos suceden cada día, sino con la interpretación que damos a cada uno de estos hechos.
En este caso, el químico cerebral del “amor” nos hace fantasear, nos hace sufrir, nos hace suspirar o incluso nos hace llorar. ¿Y todo para qué? Para hacer que el cerebro se mantenga generando el péptido del amor. ¿Qué pasa cuando tenemos un amor que no nos corresponde o que simplemente no nos pela? Ese hecho nos hace sufrir o nos hace sentir mal. Y es precisamente el péptido que nos da esa sensación la que hace que se nos refuerce la sensación de falta del péptido del amor.
Así que como verás, no hay nada nuevo aquí, ya que la Física Cuántica explica muy claramente este hecho de la siguiente manera:
Cuando una persona está enamorada, el péptido del amor es generado en el hipotálamo. La hipófisis se encarga de llevar estos péptidos a través del torrente sanguíneo a todas las células del cuerpo. Es entonces cuando la droga del amor se apodera de todo nuestro cuerpo como si estuviéramos drogrados (que de hecho lo estamos). En este estado, no existen pensamientos negativos. No hay diálogo auto crítico. Todo es bello. El mundo es, como dicen, color de rosa.
Con este torrente de pensamientos positivos, el cerebro holográfico se mantiene creando una realidad perfecta: todo nos sale bien, siempre estamos bien, estamos sanos, etc. Pero en el momento en que algo no funciona adecuadamente con nuestro “amor” o nuestra persona enamorada, los pensamientos de crítica, los cuestionantes y la inseguridad comienzan a emerger. Hay que recordar que aquello en lo que ponemos nuestra atención, crece. ¿Qué es lo que pasa? Que las cosas terminan haciéndose realidad.
Los experimentos cuánticos muestran que el cambiar nuestra mente literalmente cambia nuestra materia. Nuestros pensamientos guían todos nuestros sentimientos y comportamientos, así que el cambiar conscientemente nuestro pensamiento puede crear conexiones cerebrales más profundas e intimidad con aquellas personas que amamos.
La forma en que creamos nuestro entorno está relacionada íntima y directamente con nuestras emociones. Depende del estado de nuestras emociones la forma en que nuestro entorno se "porta" con nosotros para darnos las experiencias que "avalan" a nuestras emociones.
¿Cuales son tus emociones principales el día de hoy? Si me lo dices, te diré cómo es tu realidad en este día.
Te cuidado con lo que sientes y con lo que piensas.
Hasta la siguiente.
Desde el punto de vista biológico, ¿cómo describimos el amor?
Químicamente hablando, es un estado muy similar al que tenemos cuando comemos chocolate. El chocolate ha sido incluso llamado “La comida del amor”, ya que el chocolate estimula la producción de un neurotransmisor llamado “dopamina”, mismo que se encarga de activar la proteína que inicia la segregación de hormonas que supuestamente hace que una persona se sienta atraída hacia el sexo. Obviamente, todos sabemos que hay muchos hombres y mujeres que parece que nacieron con una barra de chocolate en el cerebro y que parece que piensan con otras partes del cuerpo que no son necesariamente el cerebro ;-)
Desde el punto de vista emocional, y como ya lo comentaba yo en posts anteriores, el amor es una emoción que se encuentra grabada holográficamente en el cerebro y el cerebro tiene un químico asociado directamente con esta emoción. Así que técnicamente y desde el punto de vista químico, el amor es un péptido emitido por el hipotálamo que se encarga de alimentar a las células de todo el cuerpo.
Como ya lo comentaba, tendemos a hacernos adictos a nuestras emociones, y el amor, al ser una emoción, no es una excepción. Es más fácil que difícil que una persona se haga adicta a esta emoción.
De aquí es de donde sale el famoso amor platónico, donde por ejemplo, una persona tiene una sensación de “amor” hacia otra persona que por lo regular no lo pela. Sin embargo, esto es otra ilusión que nos da el cerebro, ya que hay que recordar que la verdadera experiencia de vida no ocurre con los hechos que nos suceden cada día, sino con la interpretación que damos a cada uno de estos hechos.
En este caso, el químico cerebral del “amor” nos hace fantasear, nos hace sufrir, nos hace suspirar o incluso nos hace llorar. ¿Y todo para qué? Para hacer que el cerebro se mantenga generando el péptido del amor. ¿Qué pasa cuando tenemos un amor que no nos corresponde o que simplemente no nos pela? Ese hecho nos hace sufrir o nos hace sentir mal. Y es precisamente el péptido que nos da esa sensación la que hace que se nos refuerce la sensación de falta del péptido del amor.
Así que como verás, no hay nada nuevo aquí, ya que la Física Cuántica explica muy claramente este hecho de la siguiente manera:
Cuando una persona está enamorada, el péptido del amor es generado en el hipotálamo. La hipófisis se encarga de llevar estos péptidos a través del torrente sanguíneo a todas las células del cuerpo. Es entonces cuando la droga del amor se apodera de todo nuestro cuerpo como si estuviéramos drogrados (que de hecho lo estamos). En este estado, no existen pensamientos negativos. No hay diálogo auto crítico. Todo es bello. El mundo es, como dicen, color de rosa.
Con este torrente de pensamientos positivos, el cerebro holográfico se mantiene creando una realidad perfecta: todo nos sale bien, siempre estamos bien, estamos sanos, etc. Pero en el momento en que algo no funciona adecuadamente con nuestro “amor” o nuestra persona enamorada, los pensamientos de crítica, los cuestionantes y la inseguridad comienzan a emerger. Hay que recordar que aquello en lo que ponemos nuestra atención, crece. ¿Qué es lo que pasa? Que las cosas terminan haciéndose realidad.
Los experimentos cuánticos muestran que el cambiar nuestra mente literalmente cambia nuestra materia. Nuestros pensamientos guían todos nuestros sentimientos y comportamientos, así que el cambiar conscientemente nuestro pensamiento puede crear conexiones cerebrales más profundas e intimidad con aquellas personas que amamos.
La forma en que creamos nuestro entorno está relacionada íntima y directamente con nuestras emociones. Depende del estado de nuestras emociones la forma en que nuestro entorno se "porta" con nosotros para darnos las experiencias que "avalan" a nuestras emociones.
¿Cuales son tus emociones principales el día de hoy? Si me lo dices, te diré cómo es tu realidad en este día.
Te cuidado con lo que sientes y con lo que piensas.
Hasta la siguiente.
El Modelo Holográfico
En este post quiero comentar sobre un modelo de percepción de realidad conocido como "El Modelo Holográfico".
El holograma es una imagen tridimensional construida con la ayuda de un laser, y se debe a la idea original de dos de los más eminentes pensadores que el mundo ha producido: David Bohm, un físico de la Universidad de Londres y protegido de Einstein y Kart Pribram, neurofisiólogo de la Universidad de Stanford y uno de los más respetados físicos cuánticos.
Después de diversos experimentos conducidos durante la década de los 20’s, el neurocirujano canadiense Wilder Penfield demostró que el cerebro almacena todo lo que vivimos en nuestra vida; todo, desde la cara de algún extraño hasta la mancha de polvo que vimos en una mesa cuando teníamos 4 años.
Esto derivó en el pensamiento que desde entonces se ha manejado como un modelo que explica muchísimas de las funciones del cerebro. A principios de los 40’s era generalmente aceptado que las memorias estaban localizadas en el cerebro. Cada memoria: desde personas, eventos, situaciones, sensaciones, aromas, sabores, etc. En esa época se pensaba que la información estaría almacenada en las células cerebrales o tal vez en alguna clase de molécula.
El cerebro puede almacenar todo, ya que tiene una capacidad increíble de almacenamiento de tipo biológico. Imagínate, durante una vida humana normal, el cerebro puede almacenar 2.8 por 10 a la 20 bits de información, que es igual a 32,596,290,112 gigabytes de información, o lo que es igual a 11,126,200,358,072 canciones MP3. Esto fue calculado por el brillante físico y matemático John von Newman.
Regresando a la idea del holograma, primero tenemos que entender bien lo que es un holograma. Un holograma no es solo como las estampitas que vienen como regalo en las bolsas de las papas fritas, ni en las botellas de los refrescos de cola. Un holograma es una figura formada por dos rayos laser que se proyectan en un mismo punto. La característica más asombrosa es que un holograma puede ser impreso y aun así observarse de forma distinta dependiendo del ángulo en que se mira.
¿Por qué digo esto? Porque si partimos un holograma en dos, cualquiera de las 2 mitades contiene la misma información que el todo, solo que en un tamaño más pequeño. De esta forma, si partimos el holograma en 4, 8, 16, 32, 64 o más partes, de igual forma cada una de las partes contiene, en una menor escala la misma información que el todo.
A través de cientos de experimentos desarrollados desde 1940 a la fecha, hoy se ha demostrado que este modelo holográfico se utiliza actualmente para explicar que la mente es un gran holograma que puede utilizarse para explicar una gran cantidad de los misterios de la mente.
Primer ejemplo: Algunas personas poseen memoria fotográfica, y no es más que una habilidad más desarrollada para poder “proyectar” lo que ya se encuentra almacenado en la mente. Esta es una de las características de los hologramas.
Segundo ejemplo: Las personas que han sufrido la pérdida de alguna extremidad, a veces reportan que siguen sintiendo esa extremidad. La ilusión de que las cosas están localizadas donde no están es otra de las características de un holograma.
Tercer ejemplo: En individuos que han tenido que removérseles porciones del cerebro, se ha encontrado que la información de las partes removidas permanece aun en las zonas que siguen funcionando. Esta característica del todo grabado en el todo es otra función importantísima de los hologramas.
La teoría cuántica más fuerte respecto a la creación consciente de la realidad reside en este modelo holográfico. La mente es un holograma matemático y su funcionamiento está diseñado matemáticamente. A través de la creación holográfica del cerebro, es como fabricamos nuestra realidad diaria. El cerebro opera matemáticamente para la fabricación de nuestra realidad diaria.
Debo hacer una confesión personal: Siempre odié las matemáticas cuando estuve en la preparatoria. Siempre que le preguntaba a mi maestro de matemáticas de la prepa (que además fue el mismo durante los 3 años) para qué me servirían las matemáticas, nunca quiso decirme, aunque ya a la distancia, la verdad es que creo que nunca supo. Desde que aprendí que la realidad se fabrica a través de un modelo matemático del cerebro, aprendí a ver las matemáticas con ojos distintos.
Existe mucha evidencia que sustentan el hecho de que las matemáticas están embebidas en el cerebro y que participan de forma directa en la creación de nuestra realidad diaria. Más nos vale hacernos conscientes de saber qué es lo que está pasando ahi dentro.
Hasta la siguiente.
El holograma es una imagen tridimensional construida con la ayuda de un laser, y se debe a la idea original de dos de los más eminentes pensadores que el mundo ha producido: David Bohm, un físico de la Universidad de Londres y protegido de Einstein y Kart Pribram, neurofisiólogo de la Universidad de Stanford y uno de los más respetados físicos cuánticos.
Después de diversos experimentos conducidos durante la década de los 20’s, el neurocirujano canadiense Wilder Penfield demostró que el cerebro almacena todo lo que vivimos en nuestra vida; todo, desde la cara de algún extraño hasta la mancha de polvo que vimos en una mesa cuando teníamos 4 años.
Esto derivó en el pensamiento que desde entonces se ha manejado como un modelo que explica muchísimas de las funciones del cerebro. A principios de los 40’s era generalmente aceptado que las memorias estaban localizadas en el cerebro. Cada memoria: desde personas, eventos, situaciones, sensaciones, aromas, sabores, etc. En esa época se pensaba que la información estaría almacenada en las células cerebrales o tal vez en alguna clase de molécula.
El cerebro puede almacenar todo, ya que tiene una capacidad increíble de almacenamiento de tipo biológico. Imagínate, durante una vida humana normal, el cerebro puede almacenar 2.8 por 10 a la 20 bits de información, que es igual a 32,596,290,112 gigabytes de información, o lo que es igual a 11,126,200,358,072 canciones MP3. Esto fue calculado por el brillante físico y matemático John von Newman.
Regresando a la idea del holograma, primero tenemos que entender bien lo que es un holograma. Un holograma no es solo como las estampitas que vienen como regalo en las bolsas de las papas fritas, ni en las botellas de los refrescos de cola. Un holograma es una figura formada por dos rayos laser que se proyectan en un mismo punto. La característica más asombrosa es que un holograma puede ser impreso y aun así observarse de forma distinta dependiendo del ángulo en que se mira.
¿Por qué digo esto? Porque si partimos un holograma en dos, cualquiera de las 2 mitades contiene la misma información que el todo, solo que en un tamaño más pequeño. De esta forma, si partimos el holograma en 4, 8, 16, 32, 64 o más partes, de igual forma cada una de las partes contiene, en una menor escala la misma información que el todo.
A través de cientos de experimentos desarrollados desde 1940 a la fecha, hoy se ha demostrado que este modelo holográfico se utiliza actualmente para explicar que la mente es un gran holograma que puede utilizarse para explicar una gran cantidad de los misterios de la mente.
Primer ejemplo: Algunas personas poseen memoria fotográfica, y no es más que una habilidad más desarrollada para poder “proyectar” lo que ya se encuentra almacenado en la mente. Esta es una de las características de los hologramas.
Segundo ejemplo: Las personas que han sufrido la pérdida de alguna extremidad, a veces reportan que siguen sintiendo esa extremidad. La ilusión de que las cosas están localizadas donde no están es otra de las características de un holograma.
Tercer ejemplo: En individuos que han tenido que removérseles porciones del cerebro, se ha encontrado que la información de las partes removidas permanece aun en las zonas que siguen funcionando. Esta característica del todo grabado en el todo es otra función importantísima de los hologramas.
La teoría cuántica más fuerte respecto a la creación consciente de la realidad reside en este modelo holográfico. La mente es un holograma matemático y su funcionamiento está diseñado matemáticamente. A través de la creación holográfica del cerebro, es como fabricamos nuestra realidad diaria. El cerebro opera matemáticamente para la fabricación de nuestra realidad diaria.
Debo hacer una confesión personal: Siempre odié las matemáticas cuando estuve en la preparatoria. Siempre que le preguntaba a mi maestro de matemáticas de la prepa (que además fue el mismo durante los 3 años) para qué me servirían las matemáticas, nunca quiso decirme, aunque ya a la distancia, la verdad es que creo que nunca supo. Desde que aprendí que la realidad se fabrica a través de un modelo matemático del cerebro, aprendí a ver las matemáticas con ojos distintos.
Existe mucha evidencia que sustentan el hecho de que las matemáticas están embebidas en el cerebro y que participan de forma directa en la creación de nuestra realidad diaria. Más nos vale hacernos conscientes de saber qué es lo que está pasando ahi dentro.
Hasta la siguiente.
21 mayo, 2006
El acto de la creación
Hoy te voy a platicar en cómo la Física Cuántica explica la forma en que constantemente nuestra realidad se crea y se destruye.
La Física Cuántica nos dice que el acto de observar un objeto es lo que causa que ese objeto esté ahí donde y cuando se le observa. Si recuerdas, yo platicaba en otro post que la energía son las partículas sub atómicas que forman los átomos que finalmente forman a la materia (al menos como la percibimos). Esta energía existe como olas esparcidas por el espacio y el tiempo. Solo cuando ejercitamos la observación es que estas “olas” de energía se convierten en partículas localizadas en cierto tiempo y espacio. Al momento en que dejas de observar estas partículas, se vuelven una oleada de energía de nuevo. Así que como podrás ver, nuestra observación, nuestra atención hacia algo, y nuestra intención, literalmente crean los objetos que vemos diariamente en un determinado tiempo y espacio.
Ningún objeto sólido es sólido. Está hecho de paquetes de energía que se encuentran “flasheando" rápidamente. Trillones y trillones de paquetes de energía “flashean" dentro y fuera de nuestro tiempo y espacio, pero nunca se quedan aquí. Entonces, ¿porqué un cuerpo humano o un automóvil (por ejemplo)se aprecian como un objeto contínuo cuando ya se sabe que no es más que un campo de energía “flasheando" rápidamente dentro y fuera de la existencia?
Para responder esto, quiero hacer una analogía a una televisión. Piensa en una televisión. Cuando ves una película observas a una persona caminando de un lado a otro de la pantalla, aunque en realidad se trata de un rollo de película que proyecta entre 24 y 30 cuadros por segundo ligeramente diferentes unos a otros, de tal forma que los ojos no detectan la diferencia entre cada cuadro. Aun estos cuadros son una composición de billones de fotones de luz “flasheando" a la velocidad de la luz.
¿Alguna vez has visto algún video casero que filma el monitor de una computadora o una televisión? ¿Cómo se ve la pantalla? ¿Porqué se ven esas líneas horizontales que suben por las pantallas?
Se debe a que la cámara de video con que se grabó tiene una frecuencia de grabado (la velocidad con la que la cámara "ve" los objetos) muy distinta a la frecuencia de barrido (la velocidad con que el monitor "despliega" su contenido) de los monitores de computadora o televisión.
Esto es algo importante, ya estamos hablando de frecuencias. Por esta razón es que no podemos ver estos trillones de paquetes de energía que aparecen y desaparecen miles de veces cada segundo, porque este “flasheo” ocurre a una frecuencia distinta que la que nuestros ojos pueden ver.
Esto es lo que nuestro mundo es: un flasheo rápido que causa una ilusión de que todo es sólido y continuo. El detalle es que estamos acostumbrados a ver nuestro mundo desde un solo punto de vista.
Por esto es que existen diferentes niveles de “realidad”, porque la realidad tiene implicaciones mucho más profundas y mucho más externas que lo que vemos. Para poder ver hacia adentro, necesitamos vibrar a frecuencias más altas. Para ver hacia fuera, es decir en el mundo físico, la frecuencia será mucho más baja, mucho más densa.
Sin embargo, como ya sabemos, estos paquetes de energía están formados por lo mismo que nuestros pensamientos. Esto es, energía. Entonces, es hasta cierto punto obvio pensar en que nuestros pensamientos pueden interferir en la forma en que estos paquetes de energía se manifiestan. O sea, que podemos de una forma consciente hacer que estas energías de altas frecuencias vibracionales se manifiesten en este universo de bajas frecuencias vibracionales. Al final de cuentas, todo está hecho de lo mismo.
Este es el principio mismo de cómo se fabrica la realidad. Este conocimiento es lo que da base a que todo lo demás suceda.
En mi opinión, tenemos una muy pobre descripción de nuestro mundo, porque solo lo apreciamos y experimentamos desde un solo punto de vista. Pero hay que recordar que tenemos muchos niveles de realidad. Todos son ciertos y todos ocurren al mismo tiempo. Hay que quitarnos la venda de los ojos y dejar de pensar que el mundo es solo lo que vemos todos los días.
Me despido con este pensamiento:
“En este infinito mar de posibilidades que existen alrededor nuestro, ¿cómo es que nos mantenemos creando y re-creando las mismas realidades? O dicho de otra forma, Si la vida es un buffet, ¿por qué nos servimos siempre la misma comida? ¿Será porque somos adictos a ella?"
¿Cual es la realidad que creas para tí cada día? ¿Esta realidad te gusta? ¿Te funciona?. ¿Si? ¡Felicidades!
¿No?
Hasta la próxima.
La Física Cuántica nos dice que el acto de observar un objeto es lo que causa que ese objeto esté ahí donde y cuando se le observa. Si recuerdas, yo platicaba en otro post que la energía son las partículas sub atómicas que forman los átomos que finalmente forman a la materia (al menos como la percibimos). Esta energía existe como olas esparcidas por el espacio y el tiempo. Solo cuando ejercitamos la observación es que estas “olas” de energía se convierten en partículas localizadas en cierto tiempo y espacio. Al momento en que dejas de observar estas partículas, se vuelven una oleada de energía de nuevo. Así que como podrás ver, nuestra observación, nuestra atención hacia algo, y nuestra intención, literalmente crean los objetos que vemos diariamente en un determinado tiempo y espacio.
Ningún objeto sólido es sólido. Está hecho de paquetes de energía que se encuentran “flasheando" rápidamente. Trillones y trillones de paquetes de energía “flashean" dentro y fuera de nuestro tiempo y espacio, pero nunca se quedan aquí. Entonces, ¿porqué un cuerpo humano o un automóvil (por ejemplo)se aprecian como un objeto contínuo cuando ya se sabe que no es más que un campo de energía “flasheando" rápidamente dentro y fuera de la existencia?
Para responder esto, quiero hacer una analogía a una televisión. Piensa en una televisión. Cuando ves una película observas a una persona caminando de un lado a otro de la pantalla, aunque en realidad se trata de un rollo de película que proyecta entre 24 y 30 cuadros por segundo ligeramente diferentes unos a otros, de tal forma que los ojos no detectan la diferencia entre cada cuadro. Aun estos cuadros son una composición de billones de fotones de luz “flasheando" a la velocidad de la luz.
¿Alguna vez has visto algún video casero que filma el monitor de una computadora o una televisión? ¿Cómo se ve la pantalla? ¿Porqué se ven esas líneas horizontales que suben por las pantallas?
Se debe a que la cámara de video con que se grabó tiene una frecuencia de grabado (la velocidad con la que la cámara "ve" los objetos) muy distinta a la frecuencia de barrido (la velocidad con que el monitor "despliega" su contenido) de los monitores de computadora o televisión.
Esto es algo importante, ya estamos hablando de frecuencias. Por esta razón es que no podemos ver estos trillones de paquetes de energía que aparecen y desaparecen miles de veces cada segundo, porque este “flasheo” ocurre a una frecuencia distinta que la que nuestros ojos pueden ver.
Esto es lo que nuestro mundo es: un flasheo rápido que causa una ilusión de que todo es sólido y continuo. El detalle es que estamos acostumbrados a ver nuestro mundo desde un solo punto de vista.
Por esto es que existen diferentes niveles de “realidad”, porque la realidad tiene implicaciones mucho más profundas y mucho más externas que lo que vemos. Para poder ver hacia adentro, necesitamos vibrar a frecuencias más altas. Para ver hacia fuera, es decir en el mundo físico, la frecuencia será mucho más baja, mucho más densa.
Sin embargo, como ya sabemos, estos paquetes de energía están formados por lo mismo que nuestros pensamientos. Esto es, energía. Entonces, es hasta cierto punto obvio pensar en que nuestros pensamientos pueden interferir en la forma en que estos paquetes de energía se manifiestan. O sea, que podemos de una forma consciente hacer que estas energías de altas frecuencias vibracionales se manifiesten en este universo de bajas frecuencias vibracionales. Al final de cuentas, todo está hecho de lo mismo.
Este es el principio mismo de cómo se fabrica la realidad. Este conocimiento es lo que da base a que todo lo demás suceda.
En mi opinión, tenemos una muy pobre descripción de nuestro mundo, porque solo lo apreciamos y experimentamos desde un solo punto de vista. Pero hay que recordar que tenemos muchos niveles de realidad. Todos son ciertos y todos ocurren al mismo tiempo. Hay que quitarnos la venda de los ojos y dejar de pensar que el mundo es solo lo que vemos todos los días.
Me despido con este pensamiento:
“En este infinito mar de posibilidades que existen alrededor nuestro, ¿cómo es que nos mantenemos creando y re-creando las mismas realidades? O dicho de otra forma, Si la vida es un buffet, ¿por qué nos servimos siempre la misma comida? ¿Será porque somos adictos a ella?"
¿Cual es la realidad que creas para tí cada día? ¿Esta realidad te gusta? ¿Te funciona?. ¿Si? ¡Felicidades!
¿No?
Hasta la próxima.
16 mayo, 2006
¿Realmente vemos todo lo que "creemos" ver?
Para demostrar cómo nuestro cerebro construye lo que percibimos como realidad, acerca tu mirada a la ilustración y mantenla al nivel del ojo. Cierra tu ojo izquierdo y permanece con la mirada fija en el círculo negro que se encuentra a la mitad de la rejilla de cuadrados.
Lentamente mueve tu cabeza hacia a trás y adelante sobre tu línea de visión hasta que la estrella desaparezca.
La estrella desaparece porque cae dentro de tu punto ciego (todos tenemos uno o varios puntos ciegos en nuestra visión.
Ahora cuerra tu ojo derecho y mira fijamente a la estrella hasta que el punto negro desaparezca. Cuando esto ocurra, nota que aunque el punto negro desaparezca, las líneas de la rejilla de cuadrados permanece intacta. Esto es debido a que tu cerebro está llenando el espacio con lo que "cree" o "piensa" que debería de estar ahí.
¿Te das cuenta de esto? ¿Te has puesto a pensar cuantas cosas e ideas en tu vida están ahí solamente porque tu "crees" o "piensas" que ahí deberían de estar?
¿Tal vez estás acostumbrado a pensar que el mundo se rige por lo que crees de él? ¿Y si no fuera así? ¿Cuantos "puntos ciegos" podrías tener en tu sistema de creencias?
Hasta la próxima.
14 mayo, 2006
¿De qué están hechas las cosas?
Hoy quiero compartir información práctica sobre la utilidad de la física cuántica en nuestro mundo real. En nuestra mundana realidad.
Hace algunos meses platicaba con algunos de mis alumnos sobre la física cuántica y la forma en que se relacionaba con la riqueza y la felicidad. Su primera impresión fue ¿Y qué tienen que ver una cosa con la otra? Son cosas completamente opuestas. Bueno, creo que es momento de comenzar a creer que estos términos no solo tienen mucho que ver, sino que tienen TODO que ver.
En ese momento mi respuesta fue: ¿Cómo puedes construir una casa si no sabes de qué está hecha una casa ni cómo construirla? O dicho en nuestro tema: ¿Cómo puedes alcanzar la riqueza, la felicidad o la abundancia si no sabes de qué está hecha ni cómo se fabrica?
La física cuántica comienza a explicarnos como se fabrica todo en nuestro mundo. Nosotros estamos ejerciendo una manipulación directa en la totalidad de nuestro mundo físico, pero tal vez no estamos conscientes de esto. Nuestra falta de consciencia en este hecho, es decir en cómo ocurre la materia y nuestro rol en ello, hace que nuestras vidas aparezcan ante nosotros como un evento que está fuera de nuestro control. O sea que somos una minúscula hoja de árbol flotando en un mar en tempestad.
Bajo este esquema, puede parecer que somos víctimas de las circunstancias, incluyendo nuestra experiencia de riqueza o falta de ella.
Para poder entender este proceso de creación tenemos que entender lo básico de la física cuántica y créeme que lo básico es todo lo que necesitamos. Este entendimiento, este saber, nos permite tener una completa confianza, eliminar la duda, y crear nuestra realidad de una forma consciente, poderosa y maravillosa, y en muchas áreas nos hace ser más poderosos.
La física cuántica también nos muestra cómo estamos todos conectados, nos muestra cómo todos somos un solo ser que mantiene la ilusión de seres individuales separados; nos muestra también cómo la mente, el espíritu y la materia se encuentran conectados, cómo funciona el proceso de la creación, y cómo somos co-creadores de este mundo.
La física cuántica es el estudio de los tabiques de construcción del universo. Por ejemplo, tu cuerpo está formado por células, tus células están hechas de moléculas que a su vez están formadas por átomos, que a su vez se forman por partículas sub atómicas, como los electrones. Este es el mundo de la física cuántica. Todo está hecho de grandes grupos de partículas sub atómicas. Todo: tu cuerpo, un árbol, los pensamientos, un coche, un planeta, la luz y todo esto son “concentraciones” de energía. Todo esto son grandes colecciones del mismo tipo de partículas sub atómicas. La única diferencia es la forma en que estas partículas se agrupan en bloques más grandes.
Saber cómo funcionan estas partículas es un factor clave para conocer cómo re-crearte a ti mismo y también el mundo alrededor de ti. Somos un gran paquete de energía, al igual que todo lo demás.
La semana anterior comentaba que las partículas sub atómicas (como los electrones) son “posibilidades de existencia”, o sea que entran y salen de nuestro plano de realidad miles de veces cada segundo y que cuando se materializan es porque estamos tomando una decisión con respecto a ellas. Es decir, que cuando decidimos algo (consciente o inconscientemente) nuestra mente materializa esa decisión en nuestro mundo diario.
Es importante saber que las características de estas partículas están a nuestra disposición, el problema es que no sabemos cómo funcionan, por consiguiente nos mantenemos fabricando la misma realidad una y otra y otra vez.
Por ejemplo, es muy curioso notar muchos chavos y chavas tienden a pensar y a actuar igual que el papá o la mamá. Pasa a cada rato que si el papá abusa físicamente de la mamá, cuando la hija crece se busca una pareja muy similar al papá solo para repetir el mismo patrón de comportamiento que aprendió de su mamá.
¿Por qué? Porque esa es la única información que poseen respecto a cómo comportarse. Esa es la “realidad” para ellos y esa realidad no cambiará a menos que inyecten en su mente a pensamientos nuevos que permitan producir nuevos resultados.
Quiero concluir este post dejando esta idea:
Si cambio mis ideas, ¿Cambiarán mis decisiones?
Si cambio mis decisiones ¿cambiará mi vida?
¿Porqué no puedo cambiar?
¿A qué tipo de pensamientos o actitudes soy adicto?
¿Cómo cambiaría mi mundo si yo pensara diferente?
Hasta la próxima
Hace algunos meses platicaba con algunos de mis alumnos sobre la física cuántica y la forma en que se relacionaba con la riqueza y la felicidad. Su primera impresión fue ¿Y qué tienen que ver una cosa con la otra? Son cosas completamente opuestas. Bueno, creo que es momento de comenzar a creer que estos términos no solo tienen mucho que ver, sino que tienen TODO que ver.
En ese momento mi respuesta fue: ¿Cómo puedes construir una casa si no sabes de qué está hecha una casa ni cómo construirla? O dicho en nuestro tema: ¿Cómo puedes alcanzar la riqueza, la felicidad o la abundancia si no sabes de qué está hecha ni cómo se fabrica?
La física cuántica comienza a explicarnos como se fabrica todo en nuestro mundo. Nosotros estamos ejerciendo una manipulación directa en la totalidad de nuestro mundo físico, pero tal vez no estamos conscientes de esto. Nuestra falta de consciencia en este hecho, es decir en cómo ocurre la materia y nuestro rol en ello, hace que nuestras vidas aparezcan ante nosotros como un evento que está fuera de nuestro control. O sea que somos una minúscula hoja de árbol flotando en un mar en tempestad.
Bajo este esquema, puede parecer que somos víctimas de las circunstancias, incluyendo nuestra experiencia de riqueza o falta de ella.
Para poder entender este proceso de creación tenemos que entender lo básico de la física cuántica y créeme que lo básico es todo lo que necesitamos. Este entendimiento, este saber, nos permite tener una completa confianza, eliminar la duda, y crear nuestra realidad de una forma consciente, poderosa y maravillosa, y en muchas áreas nos hace ser más poderosos.
La física cuántica también nos muestra cómo estamos todos conectados, nos muestra cómo todos somos un solo ser que mantiene la ilusión de seres individuales separados; nos muestra también cómo la mente, el espíritu y la materia se encuentran conectados, cómo funciona el proceso de la creación, y cómo somos co-creadores de este mundo.
La física cuántica es el estudio de los tabiques de construcción del universo. Por ejemplo, tu cuerpo está formado por células, tus células están hechas de moléculas que a su vez están formadas por átomos, que a su vez se forman por partículas sub atómicas, como los electrones. Este es el mundo de la física cuántica. Todo está hecho de grandes grupos de partículas sub atómicas. Todo: tu cuerpo, un árbol, los pensamientos, un coche, un planeta, la luz y todo esto son “concentraciones” de energía. Todo esto son grandes colecciones del mismo tipo de partículas sub atómicas. La única diferencia es la forma en que estas partículas se agrupan en bloques más grandes.
Saber cómo funcionan estas partículas es un factor clave para conocer cómo re-crearte a ti mismo y también el mundo alrededor de ti. Somos un gran paquete de energía, al igual que todo lo demás.
La semana anterior comentaba que las partículas sub atómicas (como los electrones) son “posibilidades de existencia”, o sea que entran y salen de nuestro plano de realidad miles de veces cada segundo y que cuando se materializan es porque estamos tomando una decisión con respecto a ellas. Es decir, que cuando decidimos algo (consciente o inconscientemente) nuestra mente materializa esa decisión en nuestro mundo diario.
Es importante saber que las características de estas partículas están a nuestra disposición, el problema es que no sabemos cómo funcionan, por consiguiente nos mantenemos fabricando la misma realidad una y otra y otra vez.
Por ejemplo, es muy curioso notar muchos chavos y chavas tienden a pensar y a actuar igual que el papá o la mamá. Pasa a cada rato que si el papá abusa físicamente de la mamá, cuando la hija crece se busca una pareja muy similar al papá solo para repetir el mismo patrón de comportamiento que aprendió de su mamá.
¿Por qué? Porque esa es la única información que poseen respecto a cómo comportarse. Esa es la “realidad” para ellos y esa realidad no cambiará a menos que inyecten en su mente a pensamientos nuevos que permitan producir nuevos resultados.
Quiero concluir este post dejando esta idea:
Si cambio mis ideas, ¿Cambiarán mis decisiones?
Si cambio mis decisiones ¿cambiará mi vida?
¿Porqué no puedo cambiar?
¿A qué tipo de pensamientos o actitudes soy adicto?
¿Cómo cambiaría mi mundo si yo pensara diferente?
Hasta la próxima
11 mayo, 2006
Las emociones (parte 2/2)
En este post voy a profundizar un poco más respecto a las emociones y su papel crucial en la creación de la realidad.
En el post anterior comentaba que el cerebro emite un patrón eléctrico continuo, por lo que como tal es incapaz de entender las emociones. Para poder entenderlas, el cerebro a través del hipotálamo emite una sustancia química distinta para cada emoción asociada. De esta forma es como el cerebro maneja las emociones.
Cuando una emoción se presenta, el cerebro produce el químico correspondiente. Sin embargo, aquí es donde ocurre el fenómeno de la adicción. Una adicción es algo que no queremos dejar de hacer o experimentar. Es por esta razón que cuando experimentamos una misma emoción o adicción y nos gusta la sensación que nos da, nos mantenemos buscando a toda costa experimentar más y más esta emoción o sensación.
Si lo ves bien, no nos hacemos adictos al alcohol, drogas, comida, sexo, juego, etc. por la adicción en sí, sino por la sensación que esa adicción nos da. Es decir, que esa adicción hace que nuestro cerebro produzca el químico asociado con ella. Somos adictos a esas sensaciones. Lo mismo ocurre con nuestras emociones. Nos gusta (consciente o inconscientemente) la sensación de experiencia que nos da el químico que el cerebro produce cuando esa emoción llega o se presenta.
¿Qué significa esto? Que nos mantenemos atrayendo a nuestra vida a las situaciones, personas o eventos que nos dan lo que necesitamos.
¿Has escuchado hablar de las relaciones sado-masoquistas? Este es un claro ejemplo. Cada quien en una relación de este tipo le da a la otra persona el alimento bioquímico que el cerebro necesita.
También está el caso de las personas que se casan varias veces en su vida y son incapaces de mantener una relación estable. ¿Por qué? Tal vez porque esa forma de vivir o experimentar las relaciones interpersonales les da lo que realmente necesitan.
Otro ejemplo, el chavo o la chava que constantemente tiene novios o novias que le ponen el cuerno. No importa lo que hagan, siempre termina ocurriendo lo mismo. ¿Por qué pasa esto? Otra vez, porque esa persona “atrae” a su vida a las personas que le dan el tipo de alimento bioquímico que sus células piden.
El adicto siempre necesita un poco más para alcanzar el estado eufórico o la reacción química que busca. En otras palabras, si no puedes controlar tus estados anímicos, es por que eres adicto a ellos. O sea, que si no puedes dejar de ser enojón, o burlón, o depresivo, o víctima, etc., es porque te gusta ser así. Lo disfrutas. Eres adicto a lo que esas sensaciones te dan.
Con esto no quiero decir que las emociones sean malas. No, al contrario, las emociones le dan color a nuestras experiencias. Ni siquiera podemos ver algo sin darle un matiz emocional. El problema es como nos hacemos adictos a ellas.
Este es uno de los principios más importantes con los que trabaja la Física Cuántica aplicada a la creación de la realidad: La atención. La atención que le ponemos a las cosas de nuestro mundo.
Un principio fundamental es: Para bien o para mal, aquello en lo que ponemos nuestra atención, crece. Este es un principio que también se le da en llamar intento. El intento va ligado a la creación de nuestro entorno. Todas las situaciones en las que ponemos nuestra atención o intento, tienden a crecer y a materializarse en nuestro universo físico, por lo que una vez más, quiero hacer énfasis en la importancia de estar conscientes de nuestras emociones, porque aquello que experimentamos con más frecuencia hace que pongamos nuestra atención en ello y al poner nuestra atención, comienza a materializarse en nuestra realidad.
Estamos apenas viendo la punta del iceberg. La punta del iceberg de la mecánica cuántica. Hay mucho por descubrir.
Hasta la próxima.
En el post anterior comentaba que el cerebro emite un patrón eléctrico continuo, por lo que como tal es incapaz de entender las emociones. Para poder entenderlas, el cerebro a través del hipotálamo emite una sustancia química distinta para cada emoción asociada. De esta forma es como el cerebro maneja las emociones.
Cuando una emoción se presenta, el cerebro produce el químico correspondiente. Sin embargo, aquí es donde ocurre el fenómeno de la adicción. Una adicción es algo que no queremos dejar de hacer o experimentar. Es por esta razón que cuando experimentamos una misma emoción o adicción y nos gusta la sensación que nos da, nos mantenemos buscando a toda costa experimentar más y más esta emoción o sensación.
Si lo ves bien, no nos hacemos adictos al alcohol, drogas, comida, sexo, juego, etc. por la adicción en sí, sino por la sensación que esa adicción nos da. Es decir, que esa adicción hace que nuestro cerebro produzca el químico asociado con ella. Somos adictos a esas sensaciones. Lo mismo ocurre con nuestras emociones. Nos gusta (consciente o inconscientemente) la sensación de experiencia que nos da el químico que el cerebro produce cuando esa emoción llega o se presenta.
¿Qué significa esto? Que nos mantenemos atrayendo a nuestra vida a las situaciones, personas o eventos que nos dan lo que necesitamos.
¿Has escuchado hablar de las relaciones sado-masoquistas? Este es un claro ejemplo. Cada quien en una relación de este tipo le da a la otra persona el alimento bioquímico que el cerebro necesita.
También está el caso de las personas que se casan varias veces en su vida y son incapaces de mantener una relación estable. ¿Por qué? Tal vez porque esa forma de vivir o experimentar las relaciones interpersonales les da lo que realmente necesitan.
Otro ejemplo, el chavo o la chava que constantemente tiene novios o novias que le ponen el cuerno. No importa lo que hagan, siempre termina ocurriendo lo mismo. ¿Por qué pasa esto? Otra vez, porque esa persona “atrae” a su vida a las personas que le dan el tipo de alimento bioquímico que sus células piden.
El adicto siempre necesita un poco más para alcanzar el estado eufórico o la reacción química que busca. En otras palabras, si no puedes controlar tus estados anímicos, es por que eres adicto a ellos. O sea, que si no puedes dejar de ser enojón, o burlón, o depresivo, o víctima, etc., es porque te gusta ser así. Lo disfrutas. Eres adicto a lo que esas sensaciones te dan.
Con esto no quiero decir que las emociones sean malas. No, al contrario, las emociones le dan color a nuestras experiencias. Ni siquiera podemos ver algo sin darle un matiz emocional. El problema es como nos hacemos adictos a ellas.
Este es uno de los principios más importantes con los que trabaja la Física Cuántica aplicada a la creación de la realidad: La atención. La atención que le ponemos a las cosas de nuestro mundo.
Un principio fundamental es: Para bien o para mal, aquello en lo que ponemos nuestra atención, crece. Este es un principio que también se le da en llamar intento. El intento va ligado a la creación de nuestro entorno. Todas las situaciones en las que ponemos nuestra atención o intento, tienden a crecer y a materializarse en nuestro universo físico, por lo que una vez más, quiero hacer énfasis en la importancia de estar conscientes de nuestras emociones, porque aquello que experimentamos con más frecuencia hace que pongamos nuestra atención en ello y al poner nuestra atención, comienza a materializarse en nuestra realidad.
Estamos apenas viendo la punta del iceberg. La punta del iceberg de la mecánica cuántica. Hay mucho por descubrir.
Hasta la próxima.
09 mayo, 2006
Las emociones (parte 1/2)
En este post quiero comentarte sobre las emociones desde el punto de vista de la física cuántica y cómo nos afectan en nuestra creación diaria de la realidad.
¿Qué son las emociones?
Desde el punto de vista espiritual, son sensaciones que experimentamos y que están asociadas a estados anímicos determinados. Como por ejemplo la alegría, el enojo, la ira, el amor, la felicidad, la tristeza y un muy largo etcétera.
¿Cómo catalogarías a las emociones? ¿Son buenas o malas? No son ni buenas ni malas. Las emociones simplemente “son”.
Desde el punto de vista de la física cuántica, las emociones están diseñadas para reforzarnos algo de forma química en nuestra memoria de larga duración. Es decir, nuestras emociones son sustancias químicas que se encuentran impresas en nuestra mente. ¿Qué te parece? El cerebro, para entender una emoción, tiene un químico asociado a ella.
Tenemos una sustancia química distinta para cada emoción. Cada emoción genera la segregación de una sustancia química en particular. Es como si el cerebro fuera una gran farmacia que nos da el fármaco que necesitamos.
¿Cómo funciona esto?
En el cerebro existe una zona llamada el hipotálamo. Esta parte del cerebro se encarga de fabricar las sustancias químicas en respuesta a las emociones que sentimos o experimentamos. A estas sustancias se les llama péptidos.
El cerebro convierte estos péptidos en neuro péptidos o neuro hormonas que igualan a los estados emocionales que experimentamos cada día. Esto es increíble: nuestros estados emocionales determinan qué sustancia genera el cerebro.
Tenemos sustancias químicas para el enojo, la ira, la alegría, la tristeza, para el victimismo, para la lujuria, etc. etc. etc. Vaya, existe una sustancia química para cada estado emocional que experimentamos.
Aquí viene lo más interesante. Cuando experimentamos ese estado emocional en el cerebro o en el cuerpo, el hipotálamo crea al instante el péptido correspondiente y lo vierte en el torrente sanguíneo. A través del torrente sanguíneo, los péptidos llegan a todas las partes del cuerpo.
Cada célula del cuerpo tiene sus propios receptores de péptidos capaces de recibir cualquier tipo de estos así como de la información que de ellos proviene. Ahora, cada péptido que llega a la célula hace que esta cambie desde sus mismos cimientos químicos, incluso provocando cambios en el núcleo de la célula. Imagínate esto, cambios en el núcleo de la célula, afectando con esto nuestra salud para mantenernos sanos o para enfermarnos.
Por esta razón una persona con una emoción ecstática (por ejemplo el enamoramiento) desarrolla defensas naturales contra las enfermedades, mismas que no tiene una persona con una emoción "baja" como la depresión.
Esto que voy a comentar es lo más importante: La célula es la unidad de conciencia más pequeña del cuerpo. Nuestras células reciben como alimento lo que nosotros queremos darles. Y lo chistoso de todo esto es que somos adictos a las emociones que experimentamos, por eso alimentamos a nuestras células con los mismos tipos de emociones día con día. Esto nos hace adictos a nuestras emociones.
Una adicción es algo que no podemos dejar, sin importar que nos ayude o que nos perjudique. Es decir, que nos mantenemos atrayendo a las personas o situaciones que satisfacen este apetito bioquímico y por consiguiente creamos siempre el mismo tipo de realidad todos los días. ¿Cómo te suena esto? Nuestras emociones son un factor extremadamente importante para crear nuestra realidad cada día. Tenemos aquí un primer paso para aprender a crear nuestra realidad de forma consciente.
Este primer paso es conocer las emociones que predominan en nosotros cada día, ya que si nos fijamos bien en un día normal, experimentamos más del 99% de las emociones y pensamientos que experimentamos el día anterior. Esto puede sonar terrible, pero somos adictos a nuestras emociones y a nuestros pensamientos, por eso en muchas ocasiones no queremos dejarlos o cambiarlos, aunque nos perjudiquen. Es hora de abrir los ojos.
En postings futuros voy a comentar más sobre los principios de la física cuántica en referencia a la creación de la realidad. Por ahora, finalizo la parte 1 de este tema.
Que haya suerte.
¿Qué son las emociones?
Desde el punto de vista espiritual, son sensaciones que experimentamos y que están asociadas a estados anímicos determinados. Como por ejemplo la alegría, el enojo, la ira, el amor, la felicidad, la tristeza y un muy largo etcétera.
¿Cómo catalogarías a las emociones? ¿Son buenas o malas? No son ni buenas ni malas. Las emociones simplemente “son”.
Desde el punto de vista de la física cuántica, las emociones están diseñadas para reforzarnos algo de forma química en nuestra memoria de larga duración. Es decir, nuestras emociones son sustancias químicas que se encuentran impresas en nuestra mente. ¿Qué te parece? El cerebro, para entender una emoción, tiene un químico asociado a ella.
Tenemos una sustancia química distinta para cada emoción. Cada emoción genera la segregación de una sustancia química en particular. Es como si el cerebro fuera una gran farmacia que nos da el fármaco que necesitamos.
¿Cómo funciona esto?
En el cerebro existe una zona llamada el hipotálamo. Esta parte del cerebro se encarga de fabricar las sustancias químicas en respuesta a las emociones que sentimos o experimentamos. A estas sustancias se les llama péptidos.
El cerebro convierte estos péptidos en neuro péptidos o neuro hormonas que igualan a los estados emocionales que experimentamos cada día. Esto es increíble: nuestros estados emocionales determinan qué sustancia genera el cerebro.
Tenemos sustancias químicas para el enojo, la ira, la alegría, la tristeza, para el victimismo, para la lujuria, etc. etc. etc. Vaya, existe una sustancia química para cada estado emocional que experimentamos.
Aquí viene lo más interesante. Cuando experimentamos ese estado emocional en el cerebro o en el cuerpo, el hipotálamo crea al instante el péptido correspondiente y lo vierte en el torrente sanguíneo. A través del torrente sanguíneo, los péptidos llegan a todas las partes del cuerpo.
Cada célula del cuerpo tiene sus propios receptores de péptidos capaces de recibir cualquier tipo de estos así como de la información que de ellos proviene. Ahora, cada péptido que llega a la célula hace que esta cambie desde sus mismos cimientos químicos, incluso provocando cambios en el núcleo de la célula. Imagínate esto, cambios en el núcleo de la célula, afectando con esto nuestra salud para mantenernos sanos o para enfermarnos.
Por esta razón una persona con una emoción ecstática (por ejemplo el enamoramiento) desarrolla defensas naturales contra las enfermedades, mismas que no tiene una persona con una emoción "baja" como la depresión.
Esto que voy a comentar es lo más importante: La célula es la unidad de conciencia más pequeña del cuerpo. Nuestras células reciben como alimento lo que nosotros queremos darles. Y lo chistoso de todo esto es que somos adictos a las emociones que experimentamos, por eso alimentamos a nuestras células con los mismos tipos de emociones día con día. Esto nos hace adictos a nuestras emociones.
Una adicción es algo que no podemos dejar, sin importar que nos ayude o que nos perjudique. Es decir, que nos mantenemos atrayendo a las personas o situaciones que satisfacen este apetito bioquímico y por consiguiente creamos siempre el mismo tipo de realidad todos los días. ¿Cómo te suena esto? Nuestras emociones son un factor extremadamente importante para crear nuestra realidad cada día. Tenemos aquí un primer paso para aprender a crear nuestra realidad de forma consciente.
Este primer paso es conocer las emociones que predominan en nosotros cada día, ya que si nos fijamos bien en un día normal, experimentamos más del 99% de las emociones y pensamientos que experimentamos el día anterior. Esto puede sonar terrible, pero somos adictos a nuestras emociones y a nuestros pensamientos, por eso en muchas ocasiones no queremos dejarlos o cambiarlos, aunque nos perjudiquen. Es hora de abrir los ojos.
En postings futuros voy a comentar más sobre los principios de la física cuántica en referencia a la creación de la realidad. Por ahora, finalizo la parte 1 de este tema.
Que haya suerte.
¿De qué estan hechos los pensamientos?
¿De qué están hechas las cosas?
Cuando pensamos en el universo físico al que estamos acostumbrados a ver, pensamos en dos estados: o hay materia (es decir, que podemos tocarlo, olerlo, verlo, escucharlo o degustarlo) o existe un espacio vacío. Se piensa en la materia como algo que podemos ver o tocar.
¿De qué está hecho el cuerpo humano? De agua, huesos y músculos.
¿De qué están hechos el agua, los huesos y los músculos? De células.
¿De qué están formads las células? De moléculas.
¿De qué están hechas las moléculas? De átomos.
¿De qué están hechos los átomos? De partículas sub atómicas.
¿De qué están hechas las partículas subatómicas? ¿Están hechas de energía? No, las partículas subatómicas son energía. Son partículas cuánticas.
Cuando vemos un átomo pensamos que nos estamos refiriendo a una partícula sólida. Si nos acercamos un poco más, veremos que se trata de un pequeño punto de materia muy denso en el centro y este centro está rodeado de una nube de probabilidades de electrones que, aunque parezca increíble decirlo, entran y salen de nuestra existencia.
Pero cuando nos fijamos aún más, veremos que el núcleo de los átomos también entra y sale de la existencia. Podemos decir que el átomo entero constantemente entra y sale de nuestro plano de existencia en este universo material que conocemos.
De acuerdo a la teoría cuántica, cuando no estamos observando a estos átomos, se convierten en una onda de posibilidades que pueden materializarse en cualquier lugar, en cualquier tiempo y en cualquier espacio. Pero cuando estamos mirando, se convierten en una partícula de experiencia que por si fuera poco puede estar en dos o más lugares o estados o tiempo simultáneamente.
Con estos conceptos que la ciencia moderna ha demostrado su validez, sabemos que la materia está compuesta principalmente de espacio vacío. Esto significa que todo lo que vemos y lo que no vemos así como lo que tocamos y lo que no podemos tocar, están formados de lo mismo: de materia cuántica.
Pero la ciencia no se detiene ahí, ya que podemos referirnos a esta materia sin sustancia como algo que está hecho de lo mismo que un pensamiento. Los pensamientos son una colección consecutiva de corriente eléctrica que corre a través de las neuronas de nuestros cerebros con un rango específico de frecuencias. Las frecuencias eléctricas están formados también por átomos que a su vez se componen de las mismas estructuras subatómicas que la materia más sólida pueda tener.
Las cosas no están hechas de cosas, más bien están formados de ideas, de conceptos, de pensamientos y de información.
El mundo entero, nuestro universo entero, es una gran suma de posibilidades. Todo es una posibilidad hasta que elegimos ver algo. Nuestra vida, nuestra experiencia es 100% dependiente de lo que consciente o inconscientemente queremos ver, escuchar, sentir o experimentar.
Dicho con otras palabras, nunca seremos capaces de ver (o aceptar) algo que no deseamos experimentar.
Hasta la próxima.
Cuando pensamos en el universo físico al que estamos acostumbrados a ver, pensamos en dos estados: o hay materia (es decir, que podemos tocarlo, olerlo, verlo, escucharlo o degustarlo) o existe un espacio vacío. Se piensa en la materia como algo que podemos ver o tocar.
¿De qué está hecho el cuerpo humano? De agua, huesos y músculos.
¿De qué están hechos el agua, los huesos y los músculos? De células.
¿De qué están formads las células? De moléculas.
¿De qué están hechas las moléculas? De átomos.
¿De qué están hechos los átomos? De partículas sub atómicas.
¿De qué están hechas las partículas subatómicas? ¿Están hechas de energía? No, las partículas subatómicas son energía. Son partículas cuánticas.
Cuando vemos un átomo pensamos que nos estamos refiriendo a una partícula sólida. Si nos acercamos un poco más, veremos que se trata de un pequeño punto de materia muy denso en el centro y este centro está rodeado de una nube de probabilidades de electrones que, aunque parezca increíble decirlo, entran y salen de nuestra existencia.
Pero cuando nos fijamos aún más, veremos que el núcleo de los átomos también entra y sale de la existencia. Podemos decir que el átomo entero constantemente entra y sale de nuestro plano de existencia en este universo material que conocemos.
De acuerdo a la teoría cuántica, cuando no estamos observando a estos átomos, se convierten en una onda de posibilidades que pueden materializarse en cualquier lugar, en cualquier tiempo y en cualquier espacio. Pero cuando estamos mirando, se convierten en una partícula de experiencia que por si fuera poco puede estar en dos o más lugares o estados o tiempo simultáneamente.
Con estos conceptos que la ciencia moderna ha demostrado su validez, sabemos que la materia está compuesta principalmente de espacio vacío. Esto significa que todo lo que vemos y lo que no vemos así como lo que tocamos y lo que no podemos tocar, están formados de lo mismo: de materia cuántica.
Pero la ciencia no se detiene ahí, ya que podemos referirnos a esta materia sin sustancia como algo que está hecho de lo mismo que un pensamiento. Los pensamientos son una colección consecutiva de corriente eléctrica que corre a través de las neuronas de nuestros cerebros con un rango específico de frecuencias. Las frecuencias eléctricas están formados también por átomos que a su vez se componen de las mismas estructuras subatómicas que la materia más sólida pueda tener.
Las cosas no están hechas de cosas, más bien están formados de ideas, de conceptos, de pensamientos y de información.
El mundo entero, nuestro universo entero, es una gran suma de posibilidades. Todo es una posibilidad hasta que elegimos ver algo. Nuestra vida, nuestra experiencia es 100% dependiente de lo que consciente o inconscientemente queremos ver, escuchar, sentir o experimentar.
Dicho con otras palabras, nunca seremos capaces de ver (o aceptar) algo que no deseamos experimentar.
Hasta la próxima.
07 mayo, 2006
¿Qué es la Física Cuántica?
Antes de entrar en aplicaciones directas, primero es conveniente saber qué es todo esto de la Física Cuántica. Se ha hablado muchísimo al respecto, sobre todo después de que la película What the Bleep do you know fue realizada desde el 2005.
La Universidad de Princeton (localizada en Princeton, New Jersey) define a la Física cuántica: "Es la rama de la Física encargada de estudiar la teoría cuántica".
Una definición encontrada en Wikipedia nos dice que:
"La mecánica cuántica es una teoría física fundamental que extiende y corrige la mecánica newtoniana, especialmente en los niveles atómicos y subatómicos. Constituye el marco teórico de trabajo de muchos campos de la Física y la Química, incluyendo a la física de materia condensada, química cuántica y física de partículas".
El término “Quantum” proviene del latin “cuantos” y se refiere a las unidades discretas que la teoría asigna a ciertas cantidades, tales como la energía de un átomo en descanso.
Un objeto cuántico es la habilidad para construir objetos cuánticos en la dimensión sin tiempo ni espacio.
Finalmente después de centurias completas, parece ser que la ciencia y la espiritualidad finalmente pueden comenzar a darse la mano. La física cuántica junta o casa estas dos áreas de desarrollo del ser humano, ya que:
* Tratará de explicar científicamente el espíritu, o
* Tratará de espiritualizar la ciencia.
Lo cierto de todo esto, es que existe una ciencia y aporta ideas que son tan poderosas que sugieren que tenemos un enorme poder bloqueado dentro de nosotros.
Lo mejor de todo es que se abren posibilidades infinitas que sugieren que realmente tenemos un libre albedrío para decidir qué queremos para nuestro pasado, presente y futuro, pero mejor aun, que todo esto se alinea con nuestro propósito de vida, mismo que cada día y en cada momento modificamos a nuestra completa elección.
Parece ser que depués de mucho tiempo, los hechos de la ciencia me han dado la razón.
Para concluir este post, este último comentario es para esas cuantas personas que siempre me presionaron para no creer en que esto era posible:
"Yo tenía razón. Yo estaba en lo correcto. Ahora ya hay una ciencia detrás de mi creencia. ¿Y tu donde estás ahora?"
Hasta la siguiente.
La Universidad de Princeton (localizada en Princeton, New Jersey) define a la Física cuántica: "Es la rama de la Física encargada de estudiar la teoría cuántica".
Una definición encontrada en Wikipedia nos dice que:
"La mecánica cuántica es una teoría física fundamental que extiende y corrige la mecánica newtoniana, especialmente en los niveles atómicos y subatómicos. Constituye el marco teórico de trabajo de muchos campos de la Física y la Química, incluyendo a la física de materia condensada, química cuántica y física de partículas".
El término “Quantum” proviene del latin “cuantos” y se refiere a las unidades discretas que la teoría asigna a ciertas cantidades, tales como la energía de un átomo en descanso.
Un objeto cuántico es la habilidad para construir objetos cuánticos en la dimensión sin tiempo ni espacio.
Finalmente después de centurias completas, parece ser que la ciencia y la espiritualidad finalmente pueden comenzar a darse la mano. La física cuántica junta o casa estas dos áreas de desarrollo del ser humano, ya que:
* Tratará de explicar científicamente el espíritu, o
* Tratará de espiritualizar la ciencia.
Lo cierto de todo esto, es que existe una ciencia y aporta ideas que son tan poderosas que sugieren que tenemos un enorme poder bloqueado dentro de nosotros.
Lo mejor de todo es que se abren posibilidades infinitas que sugieren que realmente tenemos un libre albedrío para decidir qué queremos para nuestro pasado, presente y futuro, pero mejor aun, que todo esto se alinea con nuestro propósito de vida, mismo que cada día y en cada momento modificamos a nuestra completa elección.
Parece ser que depués de mucho tiempo, los hechos de la ciencia me han dado la razón.
Para concluir este post, este último comentario es para esas cuantas personas que siempre me presionaron para no creer en que esto era posible:
"Yo tenía razón. Yo estaba en lo correcto. Ahora ya hay una ciencia detrás de mi creencia. ¿Y tu donde estás ahora?"
Hasta la siguiente.
03 mayo, 2006
Mi primer blog
Hola.
En respuesta a la atención que ha captado la sección Quantum en el programa "Invéntate" que conduce Eduardo Murueta, me he animado a abrir este blog para plasmar pensamientos y comentarios sobre distintas áreas de interés personales, incluyendo lo referente a la Física Cuántica y a las aplicaciones reales en la generación consciente y diaria de la realidad.
Tendré comentarios frecuentes sobre ésta y varias áreas adicionales. Sé que de una u otra forma varios de ustedes los encontrarán de interés.
Mientras tanto, pueden visitar mis otras páginas:
Estretegias de Aprendizaje
Secretos Subliminales
Hasta pronto.
En respuesta a la atención que ha captado la sección Quantum en el programa "Invéntate" que conduce Eduardo Murueta, me he animado a abrir este blog para plasmar pensamientos y comentarios sobre distintas áreas de interés personales, incluyendo lo referente a la Física Cuántica y a las aplicaciones reales en la generación consciente y diaria de la realidad.
Tendré comentarios frecuentes sobre ésta y varias áreas adicionales. Sé que de una u otra forma varios de ustedes los encontrarán de interés.
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